Flujo de bienes y servicios se complica en Europa debido al Brexit
Estanterías vacías, ausencia de streaming y complicaciones fiscales son algunos de los efectos tras el abandono del Reino Unido a la Unión Europea.
El 1 de enero el Reino Unido oficializó su salida de la Unión Europea, en medio de idas y venidas por lograr un acuerdo comercial con el organismo. A pocos días del abandono de los británicos las consecuencias ya empezaron a sentirse en algunos países del viejo continente.
Estanterías vacías en un emblemático supermercado británico en París, ingleses sin acceso a sus series preferidas en España, complicaciones fiscales son solo algunos de los problemas en el flujo de bienes y servicios que se empiezan a evidenciar.
Problemas de abastecimiento
El acuerdo concluido entre Londres y Bruselas, el último 24 de diciembre y firmado casi una semana después, no contempla cuotas ni impuestos aduaneros; no obstante, si puso fin a la libre circulación de bienes entre los países de la Unión Europea (UE) y Reino Unido, excepto entre España y Gibraltar, y entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda.
Las complejidades ya empezaron a notarse a seis días de la vigencia del Brexit. De acuerdo con AFP, seis cargamentos fueron rechazados en el puerto de Holyhead, en el país de Gales, porque aparentemente no estaban en regla.
En Francia, se notaron problemas en el suministro de alimentos en las icónicas tiendas británicas Marks & Spencer el martes debido a las nuevas reglas de exportación entre Reino Unido y la UE. En una tienda en el centro de París, los clientes se toparon con estanterías vacías a la hora del almuerzo.
Por su parte, Irlanda del Norte goza de disposiciones aduaneras específicas. Sin embargo, los productos agroalimentarios que llegan de Reino Unido requieren nuevas formalidades y controles, lo que parece causar algunos problemas.
Lo que para algunos representa un problema, para otros ha sido considerado una oportunidad como la alcaldesa de la ciudad de Calais (extremo norte de Francia), Natacha Bouchart, quien desea establecer un sistema de “duty free” en toda la “ciudad fronteriza” para apoyar a las empresas y atraer nuevos visitantes.
Desde el 1 de enero, se permite a los viajeros británicos hacer compras en las tiendas “duty-free” establecidas en particular en los aeropuertos y puertos.
Envíos se complican a causa del IVA
El cambio en las normas del IVA ha traído más de una dificultad para algunos minoristas europeos y así comercializar sus productos en Reino Unido.
Con el Brexit ya se exigen declaraciones de aduana para todos los paquetes que transitan entre Reino Unido y la UE. Los bienes enviados están sujetos al IVA.
Además, para los bienes enviados por los comerciantes directamente a los consumidores en Reino Unido, de un valor inferior a 135 libras esterlinas (183 dólares), el remitente debe pagar el IVA británico. Por encima de ese valor, lo paga el destinatario.
“Streaming” limitado
Otro problema que ha surgido es que los ingleses que viajen a países de la UE, o que por ejemplo tengan una residencia secundaria donde pasan el invierno, como es a menudo el caso en España, ya no pueden seguir mirando sus series favoritas en “streaming”.
Quienes están suscritos a los servicios de Amazon Prime y a los canales del grupo Sky TV tenían hasta ahora acceso a sus programas cuando viajaban dentro de la UE, en virtud de las reglas europeas que establecen un mercado digital único.
Con información de AFP.