¡Está listo! El telescopio James Webb llega a su forma final en el espacio
El mayor telescopio espacial de todos los tiempos ha completado el despliegue de su espejo principal y ahora está listo para comenzar a revelarnos el universo,
A dos semanas de su lanzamiento, el telescopio James Webb terminó de desplegar su espejo principal y con ello su última etapa de armado en el espacio. Después de este paso, según los científicos de la NASA, a la sonda solo le queda dirigirse a su ubicación final para comenzar a revelarnos el universo como nunca antes se ha hecho.
El hito conseguido la mañana de este sábado 8 de enero pone fin a “los 14 días de terror” que enfrentó el telescopio desde su lanzamiento, ocurrido el pasado 25 de diciembre, cuando salió de la Tierra ‘empaquetado’ en un cohete. Desde que comenzó su viaje solitario en el espacio, los operadores de la NASA tuvieron que asegurarse de completar de forma remota un total de 344 operaciones.
Celebración en la sala de operaciones del telescopio James Webb tras confirmarse el despliegue seguro del espejo primario. Foto: NASA
Una de las tareas más complicadas fue el desenrollado de su escudo solar, un parasol de cinco capas, lo cual se llevó a cabo a principios de esta semana. Luego, el miércoles 5 de enero, su espejo secundario fue colocado en posición. Y el viernes 7 de enero, se desplegó la primera ala de su espejo principal.
Ahora, con la segunda ala desplegada, el telescopio ya cuenta con su majestuoso espejo de 6,5 metros de diámetro.
Infografía de las partes del telescopio James Webb y el punto 2 de Lagrange (L2). Foto: NASA
James Webb, el telescopio espacial más poderoso jamás construido, tiene la capacidad de ver las primeras estrellas y galaxias que se formaron hace 13.600 millones de años y sacaron al universo de las tinieblas.
Esto será posible gracias a su tecnología de visión infrarroja, que permite ver los objetos más lejanos en el cosmos y, por tanto, explorar las primeras etapas del universo. En comparación, el telescopio Hubble observa principalmente a través de luz visible, la misma longitud de onda que ve el ojo humano.
Para comenzar su misión científica, el James Webb tiene que llegar al punto dos de Lagrange (L2), una zona en donde la gravedad conjunta de la Tierra y el Sol permitirá al telescopio mantener una órbita estable, a 1,5 millones de kilómetros de nuestro planeta.
Hasta el 8 de enero, el James Webb ya había completado casi el 75% de su recorrido hasta L2. Se espera que llegue a su destino en los próximos 15 días.
Con un costo total que ha excedido los 10.000 millones de dólares, es el proyecto más ambicioso en la historia de la astronomía. Detrás de él están las agencias espaciales de Estados Unidos (NASA), Europa (ESA), Canadá (CSA) y Francia (CNES).