En épocas en que las páginas de internet, computadoras o impresoras aún no eran populares entre los peruanos, muchos escolares debían ir a las bibliotecas para buscar información y hacer su tarea. Inclusive, se tenía que dibujar a mano si es que la maestra pedía algún gráfico. Sin embargo, en los 90 una imprenta revolucionó y facilitó las labores a este sector de la población.
Se trata de las láminas Huascarán, que se convirtieron en la 'Wikipedia' del momento y salvación para muchos alumnos a la hora de presentar una tarea. ¿Las recuerdas? Hasta antes de la aparición de las nuevas tecnologías y las redes sociales, la mayoría de niños no contaban con una computadora y menos una impresora. Solo había unos privilegiados que tenían en sus casas estos equipos, que en un inicio eran muy costosos.
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Ni qué hablar del internet. Por aquellas épocas no se pensaba que esta tecnología revolucionaría la vida de millones de personas. Es por ello que German Lora Castillo, fundador de la empresa Huascarán, tuvo la genial idea de lanzar al mercado estas láminas con dibujos e información que facilitaba las labores de los escolares a nivel nacional.
Aunque la empresa de don Germán se fundó en 1945, en los 90 sus láminas tuvieron gran apogeo debido a que en años anteriores los estudiantes tenían que hacer sus gráficos a mano.
Estos dibujos se imprimían en un fino papel couché. Cobraron protagonismo porque estaban diseñadas para cortar y pegar. Eran muy didácticas y respondían a varias interrogantes de los escolares.
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Lamentablemente, tras la aparición del internet y equipos tecnológicos, estas colecciones han ido desapareciendo. En algunas librerías aún se pueden encontrar, pero la mayoría de estudiantes opta por imprimir en sus hogares algún dibujo para completar su trabajo.
En redes sociales algunos usuarios rematan estas nostálgicas figuras que llegaron a costar S/0,50 por lámina.