Las historias de jóvenes venezolanos que hoy triunfan en Perú tras escapar de la grave crisis que azota su país, continúan inspirando a miles de personas. Esta vez, el protagonista es Carlos Amundarain, un joven natural de Venezuela que empezó trabajando como ambulante en las calles de Lima y ahora es dueño de dos exitosos restaurantes de venta de parrillas, ubicados en San Miguel y San Juan de Miraflores.
Sin embargo, el camino hacia el éxito no fue nada sencillo. Durante los primeros meses, el emprendedor trabajó incansablemente sin percibir ganancias, pero su esfuerzo terminó rindiendo frutos. ¿Cómo lo logró?
Venezolano empezó como ambulante y hoy tiene dos exitosos restaurantes en Lima Metropolitana. Foto: YouTube (Orwarditox y Papá Pituco).
Desde su llegada al Perú, en agosto del 2017, Carlos Amundarain buscó la forma de emprender y salir adelante. Tras su fallido paso por un restaurante en el que no le pagaron sus honorarios, empezó a vender en la calle la famosa chicha venezolana y perros calientes.
“Mi primer negocio fue el de la chicha venezolana. Puse dos carritos, que fue como la parte empresarial, estar pendiente de dos chicas que me vendían, y yo también vendía en un triciclo perro caliente. Ahí empieza el negocio”, comentó para el canal de YouTube ‘Oswarditox y Papá Pituco’.
Al poco tiempo, se aventuró a incursionar en la venta de menú, junto a su hermano que llegó de Venezuela. Sin embargo, las cifras no fueron favorables en este esquema de negocio, por lo que le propuso a su pariente continuar la lucha y apostar por un nuevo emprendimiento que terminó llevándolos al éxito.
“Yo le debía como 4 o 5 meses que no le pagaba (a mi hermano) porque obviamente las ventas no daban. Ahí es donde yo le digo: ‘o vendemos lo que tenemos y te pago lo que te debo, o simplemente vamos en sociedad y la guerreas conmigo, que yo sé que esto, en nombre de Dios, va a dar’. Y de verdad que le doy gracias porque creyó en mí”, explicó.
Carlos Amundarain empezó vendiendo en una humilde carretilla en las calles de Lima. Foto: composición (YouTube/Oswarditox y Papá Pituco).
El extranjero reveló que una de las principales razones que lo llevó a fundar D’Pana, restaurante especializado en la venta de parrillas venezolanas, fue que se cansó de la informalidad en las calles.
“Estuvimos en la charla de una ONG y prácticamente nos enseñan que, si quieres ser empresario, tienes que cambiar tu mentalidad. Ahí es donde dijimos: ‘bueno, vamos a invertir en lo que creemos’; así es como pasamos de los carritos al primer local como tal, donde ya teníamos permiso de funcionamiento. Y de verdad que lo vimos como un logro donde invertimos todo”, afirmó.
Si bien asegura que, en principio, pasó ocho meses sin obtener ganancias y cubriendo apenas los gastos de alquiler y servicios, siempre creyó en el proyecto que ahora impulsa junto a su familia.
“Gracias a Dios, se dio con trabajo y perseverancia porque duramos 8 meses sin cobrar nada. Comíamos porque obviamente teníamos un restaurante y (cubríamos) la línea para teléfonos y la habitación, pero del resto nada, durante 8 meses. Así fue que empezó la cuestión”, precisó.
El primer local fue inaugurado en la av. Guillermo Billinghurst, en San Juan de Miraflores. Gracias a la acogida de los clientes, al cabo de un tiempo decidieron expandirse hasta abrir un segundo local en San Miguel, cerca a la transitada av. La Marina.
“Creo que la idea siempre es pensar en más (…) Pasando el año fue que inauguramos D’Pana San Miguel y bueno ya va para un año. Ahorita la gente nos dice (que vayamos) para el norte, pero estamos tratando de darnos un poco de tiempo porque el tema de los restaurantes consume bastante”, señaló.
D'Pana Restaurant cuenta con dos locales: uno en San Juan de Miraflores y otro en San Miguel. Foto: captura de YouTube (Oswarditox y Papá Pituco).
Para Carlos Amundarain, la fórmula secreta de su éxito radica no solo en el trabajo duro, sino también en la decisión de seguir invirtiendo en su negocio para impulsar aún más su crecimiento. En tal sentido, exhortó a los ciudadanos que desean iniciar su propio emprendimiento a no perder la fe y ser perseverantes.
“Primero, (hay que) tener fe en lo que vas a hacer. Si quieres montar un puesto de frutas, tener fe que eso te va a dar. También tener en cuenta que es muy difícil que te de en 3 o 4 meses. Yo duré 8 meses sin cobrar, no todo el mundo aguanta eso. Por eso, voy a la perseverancia, la constancia y sobre todo el trabajo duro. Yo trabajo prácticamente 15 o 16 horas. Siempre buscando ganar un poquito más para seguir invirtiendo en el negocio (…) Mi fórmula es esa”, apuntó.
Perú es uno de los países donde más venezolanos viven. Actualmente, residen cerca de 1.5 millones de venezolanos, según informó el portal web del Gobierno del Perú.
Venezolanos en Perú. Foto: Andina
De acuerdo con las indicaciones brindadas en el portal web del Ministerio de Relaciones Exteriores, aquellos ciudadanos venezolanos que tengan residencia permanente en países que forman parte del Mercosur y cuenten con carné de extranjería o documento equivalente, requerirán de pasaporte y visa para ingresar al Perú.