Un conmovedor hallazgo. Nádia Rosângella estaba caminando por los alrededores de una plaza cerca de su casa, ubicada en Brasil, cuando, de pronto, una extraña figura llamó su atención. Ella se acercó a un nacimiento que habían armado en el lugar por las próximas celebraciones de Navidad y se percató de que un pequeño perro se había dormido en el pesebre tras ser abandonado. De inmediato, le tomó fotografías para después compartirlo en Facebook.
Al parecer, el cachorro notó que la cama del niño Jesús estaba vacía y se acostó para tomar una siesta. “Me sorprendió. ¡Era tan hermoso! Una escena tan hermosa y pura”, expresó la mujer a un medio de su país.
Fue entonces que Rosângella decidió ayudarlo a buscar un nuevo hogar. Por ello, divulgó la noticia entre sus seres queridos y personas amantes de los animales. A los días, el can fue adoptado por una amiga cercana quien le brindó mucho cariño.
“Me siento feliz y en paz sabiendo que está a salvo. Amo mucho a los animales y deseo lo mejor para todos”, comentó. Por otro lado, esta historia se volvió rápidamente en tendencia tras obtener 5.000 reacciones por parte de los usuarios en Facebook.