La evolución de la tecnología, en la gran mayoría de veces, avanza a favor de la humanidad para poder conseguir soluciones que antes no se podían lograr, o que son demasiado complicadas, retrasando así varios objetivos y proyectos. La medicina ha sido uno de los campos que más se ha beneficiado con estas mejoras tecnológicas, ya que, tras la elaboración de las primeras vacunas contra la COVID-19, surge una noticia que alegra a gran parte del sector médico.
STAR, un robot diseñado por un equipo de investigadores de la Universidad Johns Hopkins, acaba de convertirse en el primer robot en completar una cirugía delicada y compleja sin necesidad que ninguna persona lo administre, controle o guíe. En este caso, la cirugía se trata de una intervención gastrointestinal que requería conectar dos extremos del intestino de un cerdo.
Lo increíble de este hecho es que en los cuatro intentos que el robot realizó esta operación, logró efectuarlo exitosamente todas las veces, incluso haciéndolo mucho mejor que cualquier humano, según comentan en el artículo publicado por los creadores de esta máquina.
Axel Krieger, profesor de ingeniería mecánica y principal encargado de la creación de STAR, explica que la anastomosis intestinal es un procedimiento complicado debido a la precisión y a los movimientos perfectos y repetitivos requeridos. “A medida que el campo de la medicina avanza hacia enfoques más laparoscópicos para las cirugías, será importante contar con un sistema robótico automatizado diseñado para ayudar a tales procedimientos”, explicó Krieger.
Lo que más destaca del robot es que incorpora herramientas de sutura especializadas, un mejorado sistema de imágenes que incluye un endoscopio 3D y su nuevo sistema de control autónomo que adapta el plan quirúrgico en tiempo real basándose en los movimientos, muchas veces impredecibles, del tejido intestinal blando.