La brigada canina de Surquillo, integrada por Zeus, Odín, Aquiles, Brunus y Zoe, enfrenta una preocupante situación que requiere atención urgente. En lugar de las glorias pasadas, ahora viven en condiciones deplorables, según denuncias de trabajadores municipales y activistas animalistas.
Las condiciones actuales de su albergue son insalubres: jaulas deterioradas y baños colapsados generan pozas de agua servida, que no solo afectan a los canes, sino también representan un riesgo para la salud pública al estar cerca de áreas recreativas infantiles. Además, los animales son obligados a convivir con roedores provenientes de los desagües.
Zeus, uno de los perros de la brigada, ha presentado problemas de salud recientemente. Según el veterinario Alex Díaz, sufrió de gastroenteritis viral y recibió un tratamiento que incluyó Doxitel (para infecciones bacterianas), Hemolitan Pet (un multivitamínico) y Complejo B (suplemento nutricional).
Al ser consultado por ATV, un trabajador municipal dijo que el agua de los baños del estadio distrital "se han atorado y el agua está empozada hace cinco días. Es agua servida". Pese a la gravedad de las denuncias, la municipalidad surquillana asegura que la brigada canina sigue activa. No obstante, declaraciones del gerente de seguridad ciudadana, Edison Salas, contradicen esta versión. Salas afirmó que recién se están coordinando cursos de entrenamiento con la policía canina para que los serenos puedan actuar como guías de los animales.
“Hemos coordinado con la policía canina, y van a venir instructores a dar un cursillo para los serenos que se van a ser cargo de los canes como guías”, señaló Salas.
Los denunciantes piden a las autoridades tomar medidas inmediatas para resolver el problema del agua empozada y garantizar condiciones dignas para los canes, que no pueden defenderse por sí mismos. El bienestar de estos animales y la seguridad de los vecinos dependen de acciones concretas y urgentes.