Luego de más de un año y medio de haber asesinado a la joven Katherine Gómez Machare, el ciudadano venezolano Sergio Tarache admitió ser el autor de este sonado feminicidio agravado durante el juicio oral a cargo del Segundo Juzgado Penal Colegiado Permanente de la Corte Superior de Justicia de Lima.
En la audiencia realizada de manera virtual, el feminicida “pidió disculpas” a los familiares de la víctima por los “daños causados” tras rociar combustible y quemar viva a Katherine en las inmediaciones de la plaza Dos de Mayo, en el Cercado de Lima.
Sin embargo, tras aceptar su responsabilidad en los hechos, el asesino no estuvo de acuerdo con el monto de la reparación civil solicitado por el Ministerio Público, que asciende a 500.000 soles. Debido a ello, la jueza a cargo del caso determinó que la lectura de sentencia se realizará mañana jueves 12 de setiembre, desde las 4:30 p.m.
Cabe señalar que el Ministerio Público ha solicitado una condena de 30 años, 6 meses y 20 días de prisión contra Sergio Tarache, basándose en el artículo 272, inciso 2 del Código Penal. Sin embargo, Cynthia Machare exige cadena perpetua para el individuo que acabó con la vida de su hija de 18 años.
“Solo encuentro esa forma para estar tranquila. Él premeditó el asesinato. ¿Qué persona hace eso? ¿Qué culpa tenía ella de no querer nada con él?”, indicó Machare indignada.
Andrea Pardo, responsable de comunicaciones y movilización feminista de la ONG Manuela Ramos, indicó a La República que, para las víctimas y sobrevivientes de violencia, es importante que la justicia transmita un mensaje claro de no impunidad.
Sostuvo que esto permitirá que las mujeres, niñas y adolescentes que experimenten este tipo de violencia se sientan confiadas para denunciar y tener la certeza de que obtendrán justicia. Ese debe ser el camino.
Pardo mencionó que este caso se suma a la larga lista de madres que hoy aún siguen luchando por justicia para sus hijas, como en los casos de Patricia Villafuerte y Solsiret Rodríguez, que muestran cómo está la justicia en la actualidad. “Sin justicia, no hay duelo para ellas porque hay una persona libre que asesinó a sus hijas”, manifestó.
Además, hizo un llamado al Poder Ejecutivo para que revise su intención de fusionar el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), ya que ambos son vitales para atender a las mujeres, quienes enfrentan cifras alarmantes de violencia.
Si usted ha sido o conoce a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, puede comunicarse de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp), que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).