Un policía desaparecido y 11 pasajeros heridos dejó la caída de un bus interprovincial al río Uctubamba, cerca del kilómetro 33 de la carretera de penetración a Pedro Ruiz, en la provincia de Chachapoyas (Amazonas). Se trata del segundo accidente vial que ocurre en menos de 24 horas tras la tragedia de Celendín, donde perecieron 25 personas.
El vuelco de la unidad de la empresa interprovincial GH Bus ocurrió en el sector Cacli, a las 6:40 de la mañana de ayer, cuando el chofer Anaximandro Loloc Vásquez intentó evitar chocar con un mototaxi que se metió en su carril, contó a este diario un agente de la Policía de Carreteras que conversó con testigos.
Tras el despiste, policías y bomberos acudieron al lugar.
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Según miembros de la Compañía 101 Higos de Urco Chachapoyas, al llegar encontraron a los pasajeros saliendo desesperados por las ventanas del bus que se hundía en el río Uctubamba. “Algunos corrían peligro de ser arrastrados por las turbulentas aguas, por eso actuamos de inmediato y los rescatamos junto a los policías”, dijeron.
Al final de la mañana, salvaron a 11 pasajeros heridos, entre ellos un adolescente de 15 años, quienes, luego, fueron trasladados al Hospital Regional Virgen de Fátima de Chachapoyas.
Sin embargo, no pudieron hallar al suboficial de tercera PNP Fernando Tuesta Chocaca (24), quien iba camino a su centro de labores, confirmó el coronel Jhonny Valderrama, jefe de la División de Policía de Carreteras. Su compañero se encontraba junto a su familia, regresando de su día de descanso, cuando el bus cayó al río Uctubamba.
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Según las primeras informaciones, el suboficial habría rescatado a su mamá y a su hermana, y también a algunos pasajeros que estaban atrapados en el vehículo. Lamentablemente, él fue arrastrado por la corriente. Hasta el cierre, no lo ubicaban.
La Región Policial Amazonas informó a este medio que el conductor Anaximandro Loloc salió negativo en el examen de dosaje etílico y que estaba en el hospital como detenido hasta que se recupere.
En tanto, la Sutrán precisó que la unidad de placa B4Y-956, de la empresa GH Bus había sido fiscalizada en el puesto de control de Mocce, en Lambayeque, donde se verificó que sí contaba con SOAT, certificado de inspección técnica y otras autorizaciones vigentes.
Si bien el bus tiene una capacidad de 50 pasajeros, durante el accidente viajaba con 11, además del conductor.
Máximo Ortiz Marchena, conductor del bus de la empresa interprovincial Manantial de Chaqui que se cayó a un río en Celendín y ocasionó la muerte de 25 personas sigue en el Hospital Regional de Cajamarca con custodia policial. Él tiene una fractura de vértebra lumbar, informaron.
Según los deudos de las víctimas, el chofer era bueno, porque recogía a los vecinos del distrito de Sorochuco.
El Juzgado de Investigación Preparatoria de Celendín ordenó la detención preliminar por siete días del hombre.