Apuestan por la meritocracia. En el último proceso de nombramiento que debió darse en el 2022, pero se desarrolló en el 2023, cerca de 75.000 profesores alcanzaron alguna de las 98.968 plazas dispuestas a nivel nacional por el Ministerio de Educación (Minedu), con lo que lograron la estabilidad.
De ese total, 63.019 docentes pudieron nombrarse en la etapa regular; 500 en la propuesta excepcional; 8.218 en la fase extraordinaria y 3.084 en el acto público y en el acto público excepcional del proceso.
“Eso ha permitido que el porcentaje de maestros nombrados en colegios públicos se eleve de 55% a 73% en un año, revirtiendo la situación. Ahora hay 263.974 maestros nombrados y 97.661 contratados en la educación básica regular”, explicó la titular del Minedu, Miriam Ponce, ante la Comisión de Fiscalización del Congreso.
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Esa tendencia debe continuar en estos años, respondió el secretario general del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep), Lucio Castro, quien agregó que para este concurso se logró presionar al Ejecutivo para que disponga 44.000 plazas de nombramiento, las cuales se sumaron a las 50.000 plazas eventuales que se convirtieron en orgánicas a través de un proyecto de ley aprobado por el Congreso.
Otro aspecto que impulsó este alto número de docentes nombrados, según Castro, fue que una subprueba del examen escrito (de habilidades generales) no tuvo puntaje mínimo, como sucedía anteriormente.
Solo se exigió eso en la otra subprueba de conocimientos pedagógicos de la especialidad.
“Eso hizo que la mayoría de los docentes pasen a la segunda etapa descentralizada (evaluación en aula) y no se elimine en la primera por puntos. Eso generó que ya no tuviéramos 8.000 docentes nombrados, como en los anteriores concursos, sino casi 75.000”, explicó.
Ante el Congreso, la ministra Ponce señaló que los concursos de nombramiento son bianuales. Sin embargo, el dirigente del Sutep mostró su preocupación porque el Minedu hasta ahora no presenta las directivas del proceso que debe realizarse este año, según corresponde.
“El concurso del 2023, en realidad, es del 2022. Bajo esa lógica, corresponde un nuevo nombramiento este año, con las 25.000 plazas que no lograron ocuparse”, explicó.
Castro también recordó que en la negociación colectiva se acordó que el Ministerio de Educación debe presentar proyecto de ley al Congreso para que el proceso de nombramiento sea anual hasta el 2030. “Esperamos que el Ejecutivo cumpla con su palabra porque será otra razón para irnos a huelga en abril o mayo”, manifestó.
El último miércoles, la Comisión de Educación aprobó por insistencia el proyecto de ley para reponer a los docentes interinos cesados en el 2014. Sobre ese tema, el Minedu señaló que es un duro golpe a la meritocracia y desalienta a los maestros que se esfuerzan en fortalecer sus conocimientos para conseguir mejores aprendizajes en los estudiantes de la educación pública.