El contralor de la República, Nelson Shack Yalta, enfatizó que es crítica la situación de la región Lambayeque frente a las anunciadas lluvias del fenómeno El Niño (FEN), debido a la pobre ejecución de gasto que viene teniendo la Autoridad Nacional del Agua (ANA), entidad adscrita al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri). A la fecha, de los S/ 190 millones asignados para actividades de prevención en esta localidad, apenas se han utilizado S/4 millones.
En diálogo exclusivo con La República, el titular de la Contraloría reveló que dicho escenario se desprende de los problemas burocráticos, constantes cambios en las jefaturas de las instituciones directamente involucradas y la falta de personal técnico idóneo en el Gobierno central. Asimismo, por la carencia de una cultura de trabajo constante en la prevención que evite actuar solo cuando están cerca de suceder esta clase de eventos naturales que generan desgracia en gran parte del país.
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"Hay un retraso significativo en la ejecución de las actividades de prevención, como son la descolmatación de ríos o quebradas. Hemos detectado que los problemas se concentran en la ANA. Este ente tiene disponible para gastar en Lambayeque alrededor de S/190 millones, pero la ejecución financiera no llega ni a cuatro millones (…). En los siguientes dos meses ese monto puede llegar a S/30 millones o S/40 millones (con la actualización del gasto), pero de ningún modo se va a lograr la intervención de todos los puntos críticos que se habían planeado", expresó.
Seguidamente, Shack Yalta agregó: "Ayer (viernes) estuvimos en la intervención de Reque - Chancay, que comprende 4,7 km en tres sectores por S/6,3 millones (…). El 4 de noviembre ya deberían terminar los trabajos, pero solo se ha avanzado el sector de Caimito Mala Muerte, que son 1,5 km, por lo que falta el resto. Cuando llegamos recién habían empezado el tramo del sector Valencia".
El funcionario agregó: "O sea, está clarísimo que a Puerto Arturo (tercer sector) no van a llegar (…). Los niveles de ejecución del gasto, no solo financiero, sino real, están en menor proporción que en Tumbes, Piura o La Libertad. La situación de Lambayeque es crítica".
En esa misma línea, el contralor volvió a llamar a los gobiernos locales y regionales a alistarse para dar respuesta a las inundaciones que puedan generar las lluvias, las cuales traerían consigo destrucción de viviendas, colapso de desagües, terrenos de cultivos arrasados y ciudades incomunicadas. De igual manera, invocó a la población a prepararse con sus propios planes de acción.
"El tiempo para la prevención está a punto de terminar. Ahora lo que tenemos que hacer como prioridad es prepararnos para la reacción. La posibilidad de un fenómeno El Niño de fuerte intensidad se ha incrementado, lo que estima que el desastre sería mayúsculo", apuntó.
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Finalmente, Shack Yalta refirió que en los próximos días saldrá un nuevo informe de la Contraloría, en el que se dará a conocer la precariedad de los centrales de salud y postas de Lambayeque. En este documento se plasmará las deficiencias en infraestructura, carencias de recursos humanos y falta de medicamentos que tienen los establecimientos del primer nivel de atención. Estas condiciones podrían agravarse durante las vaticinadas precipitaciones pluviales.
"Los hospitales tampoco (están en la mejor situación), aunque hay que reconocer que durante la pandemia hubo un flujo económico en el segundo y tercer nivel, pero nos hemos olvidado del primer nivel. Esa es otra de las preocupaciones", concluyó.