Loreto. Las condiciones de las instituciones educativas son precarias y afectan el aprendizaje de niños, niñas y adolescentes que iniciaron el año escolar 2023 a pesar de esta problemática, que no es atendida por sus autoridades. Este hecho se evidencia en el colegio María Socorro Mendoza de la localidad de Iquitos. En sus aulas, los escolares reciben clases sentados en ladrillos a pesar de la incomodidad para la población estudiantil.
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A través de las redes sociales, se evidenció que los salones de clases tienen mobiliario de madera rústico y en mal estado, lo que obliga a que los alumnos usen ladrillos como carpetas, a pesar de que esta situación podría afectar su salud, además de la incomodidad que significa. Los directivos del colegio pidieron apoyo al Gobierno Regional de Loreto para solucionar el problema, pero, a la fecha, no hay respuesta.