La delincuencia es el pan de cada día en nuestro país. En esta oportunidad, un salón de belleza, en el distrito de Puente Piedra, fue el blanco ideal para un ladrón, quien antes de perpetrar su delito se persignó y encomendó a Dios. El curioso hecho quedó registrado en cámaras de seguridad del establecimiento.
Todo sucedió en el segundo piso de un inmueble ubicado en la cuadra 1 de la calle Billinghurst. El sujeto subió unas gradas, realizó la señal de la cruz e intentó abrir la puerta de vidrio del negocio. En un primer momento, no logró su cometido. Entonces, rompió el seguro e ingresa. "Solo se ha llevado una máquina de cortar cabello porque más allá la gente lo iba a ver", contó el dueño del local a América TV.