El Ejecutivo declaró como feriado nacional el 6 de agosto en conmemoración de la batalla de Junín, la cual es considerada como uno de los últimos enfrentamientos en el proceso de consolidación de la independencia del Perú.
Si bien esta batalla es de suma importancia en la historia de nuestro país, su relevancia traspasa nuestras fronteras por su significado en la independencia de todas las colonias de España y porque en ella participaron los ejércitos de otras naciones, como Colombia, Chile, Argentina, entre otros.
Por ello, poetas y escritores de distintos países han plasmado en sus distintas obras hermosos versos y extensas prosas al rememorar la batalla de Junín y a sus héroes. Entre los escribidores que han abordado el tema destacan Ricardo Palma, Jorge Luis Borges y José Joaquín Olmedo.
José Joaquín de Olmedo es un poeta ecuatoriano que escribió un poema lírico sobre la batalla de Junín, titulado “La victoria de Junín. Canto a Bolívar”, en 1825, el cual a lo largo de los tiempo fue republicado varias veces.
De acuerdo a la reseña del repositorio del bicentenario del Perú, la composición poética de José Joaquín de Olmedo destaca “la visión de Bolívar y sus acciones militares para la consolidación de la independencia del Perú”.
“Olmedo puso en juego los sentidos y las visiones de América en armas contra la opresión; y fue la suya poesía patriótica como alta expresión literaria de la Emancipación Americana”, escribió Augusto Tamayo Vargas en el prólogo a la edición de 1974.
El escritor argentino Jorge Luis Borges compuso el poema “Coronel Suárez”. Este personaje participó en la lucha. El autor, con su frase “esa batalla que torció el destino: Junín, resplandeciente como un sueño”, revela la importancia de este triunfo como un hito en el curso de la guerra de la independencia.
Otros de sus poemas que resaltaron la batalla y la acción del coronel Manuel Isidoro Suárez, quien fuera su bisabuelo y quien estuvo al mando de los Húsares del Perú, son “Página para recordar al Coronel Suárez, vencedor en Junín” y “Junín”, uno de los sonetos más melancólicos de Borges. Ambos fueron publicados en el libro “El otro, el mismo” (1969).
El escritor peruano Ricardo Palma escribió la tradición “El clarín de Canterac”, que narra un pasaje de la batalla de Junín. José de Canterac era un general del bando realista y el clarín era el soldado que tocaba la corneta, la cual daba ánimos a las tropas durante la contienda.
El escritor peruano Clemente Althaus también plasmó en su poema “A una espada” la victoria en la batalla de Junín: “De la Gloria cuánta hazaña/ ejecutaste en Junín,/ y allí do el poder de España/ tuvo para siempre fin”.
Por su parte, el himno nacional de Colombia, escrito por Rafael Núñez, menciona este evento en la sexta estrofa.
“Bolívar cruza el ande
Que riega dos océanos;
Espadas cual centellas
Fulguran en Junín.
Centauros indomables
Descienden a los llanos,
Y empieza a presentirse
De la epopeya el fin”.