Víctor Suárez Moreno, jefe del Instituto Nacional de Salud (INS), señaló que, pese a que la población homosexual masculina es la principal afectada por la viruela del mono hasta el momento, cualquier persona podría contagiarse de la enfermedad.
“La epidemia ha empezado fundamentalmente en (...) la población HCH, hombres que tienen sexo con hombres, en 95%, según las publicaciones científicas, 92% en los datos nacionales que tenemos. Pero eso no significa que sea una enfermedad exclusiva de este grupo de la población. Al contrario, es la población más afectada y es posible que se extienda a otros grupos poblacionales”, declaró el jefe de la INS en una entrevista a RPP.
Suárez Moreno considera que la estigmatización que se ha estado viviendo en todo el mundo en las últimas semanas contra la población gay no ayuda a la identificación temprana de los casos.
“Es importante evitar la estigmatización, porque genera mayor señalamiento y, precisamente, nuestro servicio de salud es abierto a todas las personas, no tiene este componente de estigma. Por eso es que estamos detectando tantos casos en el país hasta el momento”, señaló el jefe de la INS.
“Toda la población está en riesgo. Lo importante es la conducta de riesgo, que es tener múltiples parejas sexuales o tener contacto sexual casual (...) Las conductas de riesgo es lo que está favoreciendo la expansión de esta enfermedad”, aclaró el jefe de la INS.
Además, el especialista informó que en nuestro país ya se ha detectado el primer caso de una mujer contagiada, y en España ya se cuentan 60 mujeres afectadas en los más de 4.000 casos detectados.
PUEDES VER: Viruela del mono y COVID-19 EN VIVO: paciente con viruela de mono y VIH falleció en Hospital Dos de Mayo
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), puedes contagiarte mediante la sangre, fluidos corporales (que incluye el contacto sexual), las lesiones de la piel, las vías respiratorias e incluso materiales contaminados como la ropa de alguien contagiado.
La enfermedad consta de dos etapas, la primera conocida como periodo de invasión, la cual dura entre 0 y 5 días y se caracteriza por la fiebre, cefalea intensa, linfadenopatía (inflamación de los ganglios linfáticos), dolor lumbar, mialgias.
La segunda fase es la de erupción cutánea, y se presenta aproximadamente tres días después de la fiebre. Inicia con la inflamación de la piel, la cual se torna de color rojo y luego comienzan a aparecer bultos y ampollas que a la larga se convierten en costras. Las zonas más afectadas son el rostro (en el 95% de los casos), las palmas de las manos y las plantas de los pies (en el 75% de los casos).