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Sociedad

INPE: 479 reos del penal de Chiclayo no completan su vacunación contra la COVID-19

El jefe de la Oficina Regional INPE Norte, Walter Curo Apaza, indicó que la inmunización con las tres dosis solo se ha cumplido en el 85 % de la población penitenciaria. Actualmente, el reclusorio tiene 3.189 internos.

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Más de 4.000 internos serán beneficiados con abastecimiento de agua potable. Foto: GORE Lambayeque.

Al igual que en el exterior, dentro del penal de Chiclayo (Lambayeque) todavía existe una brecha importante de vacunación contra la COVID-19. El jefe de la Oficina Regional del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) Norte, Walter Curo Apaza, informó que de los 3.189 internos que tiene actualmente este reclusorio, solo el 85% (2.710) tiene sus tres dosis del fármaco.

En rueda de prensa, el funcionario explicó que esta situación se debe al ingreso constante de nuevos reos, quienes llegan a cumplir, la mayoría de veces, con un mandato de prisión preventiva, con solo una o ninguna de las dosis de la vacuna. Esto, evidentemente, genera preocupación en las autoridades, tras los fallecimientos que se reportaron en los penales del país en las olas pandémicas.

Con respecto al hacinamiento en este establecimiento penitenciario, Curo Apaza indicó que se han comenzado a tomar acciones para atender este problema. Es así que esta prisión ya no cuenta con un pabellón de mujeres. Todas las reclusas fueron enviadas a las diferentes cárceles del norte. En su momento, este recinto fue construido para un total de 1.143 convictos.

El jefe de la institución precisó que la ampliación del penal de Chiclayo, ubicado en el distrito de Picsi, aún sigue en conversaciones, pues no se cuenta con la licencia social para llevar a cabo el proyecto. En este punto, aseguró que “no pierden las esperanzas” que, mediante el alcalde local, se pueda obtener el consentimiento de la población para la obra.

INPE CHiclayo

Impacto de la pandemia en penales

El INPE precisó que en la primera ola de la pandemia 445 reclusos perdieron la vida a causa del SARS-CoV-2 en todo el país. En la segunda ola fueron 30 las víctimas mortales, mientras que en la tercera ola solo cuatro. Las autoridades esperan cerrar las brechas en el proceso de vacunación a fin de evitar más decesos en los penales frente a un eventual embate del virus.