Con información de Deysi Portuguez/ URPI-LR
El último miércoles 27 de abril, la vivienda de doña Carmen Núñez Céspedes, ubicada en el distrito de Santa Anita, fue blanco de tres delincuentes dedicados a robar casas. Los malhechores se llevaron joyas de oro, tres televisores, un PlayStation, tres celulares, computadoras, ropa y perfumes. Los objetos robados ascienden a un valor de 30.000 dólares.
La técnica que usan para corroborar que no hay nadie en casa es tocar el timbre varias veces. De acuerdo a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad en la zona, al promediar las 11.00 a. m., una mujer se acercó al predio y tocó el timbre en varias oportunidades. Al percatarse que nadie salía, llegó un hombre y comenzaron a forcejear la puerta hasta abrirla.
PUEDES VER: Migraciones entregará pasaportes el lunes 2 de mayo, pese a ser día no laborable para sector público
A los pocos minutos, un auto se estacionó afuera e ingresaron tres sujetos que comenzaron a cargar lo robado. El tiempo para cometer su asalto fue de una hora.
La agraviada, una modista de 70 años, había salido de compras cuando los delincuentes vaciaron su casa. Las joyas robadas eran herencia de sus padres y tenían un valor especial para ella.
“Han sido tres hombres y una dama que han ingresado a mi casa y han hecho este hurto. Manipularon la chapa. Yo he tenido guardada las herencias de mi padre y cositas que yo he adquirido hace años con mucho esfuerzo. Lo más triste para mí son mis joyas. También se han llevado joyas de mi nieto, lentes, relojes de oro”, señaló la agraviada a La República.
La víctima pidió mayor seguridad en la zona, pues no sería el único robo ocurrido en los últimos meses. “No hay seguridad hoy en día. Cómo es posible, yo no llevé mi celular para que no me lo roben en la calle y aquí dentro de mi casa se lo llevan”, sostuvo.