A través de un informe, la Contraloría determinó que el Gobierno Regional de Áncash (GRA) cometió aparentes irregularidades en la recepción de equipamiento adquirido para atender la emergencia por la COVID-19 en el Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón. Asimismo, que no se cobró penalidades por incumplimiento contractual, lo que ocasionó un perjuicio de S/ 45.390.
Según detalla el ente de control, el equipamiento era parte de la IOARR ‘Remodelación de ambiente complementario, adquisición de monitor de funciones vitales, ventilador mecánico y equipo ecógrafo; además de otros activos en el EE. SS. Eleazar Guzmán Barrón’. Estos fueron comprados mediante la contratación directa, en el marco del estado de emergencia por la pandemia.
“El informe determinó que el GRA recepcionó irregularmente equipos médicos para reforzar los servicios de salud y la contención del coronavirus. Además, demoró su entrega hasta 53 días, debilitando la atención de la población. Asimismo, no cobró penalidades al proveedor por incumplimiento contractual sobre la entrega, por lo que se generó un perjuicio económico”, refiere el documento.
El informe fue comunicado al gobernador de Áncash, Henry Borja Cruzado, con las recomendaciones para disponer el deslinde de las responsabilidades que correspondan de los 11 servidores públicos del GRA comprendidos en los hechos. De igual forma, fue remitido al procurador público de la Contraloría para emprender las acciones legales penales contra los mismos.
Áncash
El contrato también contempló la compra de pulsioxímetros, aspirador de secreciones, electrocardiógrafo de tres canales y nebulizadores para la atención de pacientes infectados con el SARS-CoV-2, con cuadros clínicos moderados y graves, durante las fases más complicadas de la pandemia.