Bajo estrictas medidas de seguridad, la noche del último domingo fueron trasladados 105 internos que se encontraban recluidos en el Establecimiento Penitenciario de Juliaca (ex-Capilla) hacia el penal de Puno (ex-Yanamayo).
El traslado fue coordinado entre agentes del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) y la Policía Nacional. Los internos, de acuerdo a información oficial, fueron trasladados por tierra a través de la carretera Juliaca - Puno a bordo de seis vehículos fuertemente custodiados por agentes armados para prevenir cualquier inconveniente.
Estas medidas se deberían a las denuncias de extorsiones desde los penales que se estuvieron presentando, tomando en cuenta la peligrosidad de algunos de estos reos.
El traslado, de acuerdo a fuentes del INPE, también sirve para reducir la sobrepoblación de reos que aqueja al penal de Juliaca.