Los dirigentes de la cuenca del río Coata, en la provincia de Puno, rechazaron dialogar con la presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez Chuquilín, en Lima y comunicaron que, de todos modos, acatarán un paro indefinido desde este lunes 15 de noviembre.
El afluente está contaminado con aguas de desagüe de la ciudad de Juliaca. 250 litros de aguas servidas por segundo contaminan el medio ambiente. Los afectados son decenas de campesinos del distrito de Coata.
Ante el anuncio de protesta, la primera ministra cursó invitación para que los dirigentes se trasladen a Lima a una reunión en la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros.
El llamado a la reunión en la capital exacerbó los ánimos de los dirigentes. Consideran que es una burla porque no cuenta con recursos para trasladarse a Lima.
“De todos modos iremos al paro. En vez que el Estado esté presente en el lugar de los hechos, ocurre que nosotros somos los que tenemos que ir a buscar solución. Esto parece la época de la colonia”, dijo el dirigente Félix Suasaca.