En Manchay, una pasajera se encontraba en un autobús, cuando un sujeto comenzó a agredirla sexualmente. Tras el hecho, la mujer denunció los tocamientos que estaba sufriendo. Ante esa situación, el chofer cerró las puertas del vehículo para retener al agresor, pero este aprovechó una ventana que estaba abierta para huir.
En el cruce de las avenidas Los Naranjos y Las Mercedes, el sujeto la comenzó a acosar y a tocar con su codo. Luego, bajó la mirada y le muestra que se estaba masturbando. La mujer le increpó al agresor y comenzó a grabarlo para poder realizar una posterior denuncia.
“Felizmente reaccioné de forma inmediata. Estoy asustada, aterrada. He llegado sorprendida, aterrada, hasta ahora lo estoy”, expresó la víctima a América Noticias.
En la comisaría de Manchay, los efectivos policiales le pidieron prueba de lo ocurrido y dificultaron el trabajo para ejercer la denuncia, según declaraciones de la joven.
“Cómo voy a predecir que me iba a pasar este tipo de cosas. Ya estoy cansada. No es lo que esperamos de esta sociedad, que minimiza este tipo de actos”, agregó.
Si eres o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).