Cerca de 5 000 familias del barrio Chicago en Trujillo estarían expuestas al contagio del coronavirus debido a los focos infecciosos de basura que registra en sus calles, y sobretodo, a la gran cantidad de comercio informal que aglomera a decenas de personas en un mismo espacio.
Esta problemática se da en el lugar tras el levantamiento de la cuarentena ya que los ambulantes han regresado a los principales jirones, debido a que la zona limita con la avenida España, una de las vías más caóticas del centro histórico.
Ante ello, los pobladores han pedido erradicar esta problemática a las autoridades municipales y sobretodo a su propio alcalde vecinal. Sin embargo, denunciaron que el representante del barrio, Carlos Guevara Véliz, no estaría trabajando para cumplir con dicho propósito.
Frente a ello, Guevara Véliz rechazó estas afirmaciones y manifestó que en múltiples oportunidades ha gestionado acciones en favor del lugar, pero no ha tenido la respuesta necesaria de las autoridades.
Además, indicó que coordinará una reunión con sus vecinos para evaluar medidas drásticas como el desalojo de los ambulantes.