Luis Álvarez Guevara
Sólo era cuestión de tiempo para que la mecha prenda otra vez. Comuneros de cinco distritos de la provincia cusqueña de Espinar iniciaron un paro preventivo de 48 horas contra el Gobierno Central y la empresa minera Glencore Antapaccay.
La protesta inició ayer muy temprano con el bloqueo de vías y piquetes estratégicamente instalados en los sectores del óvalo de Pallpata y distrito de Condoroma. Esta ruta comunica Cusco con Arequipa, también es conocida como parte del corredor minero utilizada por las mineras que operan en Cusco y Apurímac para transportar el mineral a la costa sur.
Hasta el cierre de esta edición, cientos de pobladores mantenían interrumpido el tránsito de vehículos.
Los pobladores de Pallpata, Condoroma, Ocoruro, Alto Pichigua y Pichigua plantean la anulación de la resolución 00196-2019 del 17 de diciembre último. Con este documento, el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace) aprueba la Modificación del Estudio de Impacto Ambiental (MEIA) para la ampliación del proyecto minero Antapaccay Expansión Tintaya-Integración Coroccohuayco. Para los pobladores, antes de la luz verde, debió consultarse a los involucrados.
Glencore Antapaccay pretende expandir su producción de cobre a tajo abierto y en forma subterránea. Las operaciones se desarrollarán en el sector de Coroccohuayco, en las cuencas de los ríos Salado y Cañipía, y según los pobladores, ahí se reconocen los derechos de 13 comunidades campesinas y se estaría excluyendo al resto de habitantes ubicados directamente en la zona de impacto ambiental. Amenazan con una huelga indefinida en caso no sean atendidos en las próximas 24 horas.
Por séptimo día, pobladores de la comunidad de Urinsaya en el distrito de Coporaque (Espinar) se oponen al paso de camiones mineros de la minera MMG Las Bambas. Además, exigen al Gobierno que anule la reclasificación a vía nacional de algunos tramos. Las protestas también son en Chumbivilcas.