Roberth Orihuela Q.
Los obreros de Construcción Civil paralizaron por cuarto día consecutivo. Protestan contra la empresa que construye la ampliación del Penal de Socabaya; acusan a la constructora de no contratar obreros sindicalizados. Ayer hubo un amague de enfrentamiento en las inmediaciones del reclusorio.
Los obreros iniciaron la huelga el lunes. Según Andrés Saya, secretario general del sindicato, el consorcio penitenciario Misti tenía un acuerdo firmado con el sindicato para dar una cuota de trabajo del 40% en el proyecto. Sin embargo, no están cumpliendo. “Solo ponen a algunos obreros del sindicato. De los 200 que trabajan, apenas 10 son sindicalizados”, aseguró Saya.
Los pedidos de incrementar la cuota no han sido escuchados por la empresa. Por ello iniciaron una huelga a la que se han integrado trabajadores de otros proyectos en la provincia.
Para resolver el problema, el sindicato y representantes de la empresa acudieron el martes ante el Defensor del Pueblo, Ángel María Manrique. Según Saya, fueron cinco horas de conversaciones sin fruto alguno. “La empresa no quiere dar su brazo a torcer. No quieren cumplir el compromiso inicial que tuvieron con trabajadores de Arequipa”, dijo.
Se supo que la empresa solo quiere darles un 20% de la cuota de trabajo. Pero los obreros se han cerrado en su 40%. Al no haber acuerdo, ambos han pateado el tablero.
Ayer los trabajadores intentaron llegar a la obra, pero un contingente de al menos 50 policías con tanquetas repelieron a los manifestantes muy temprano. Hubo un amague de enfrentamiento en la avenida principal de la zona de Horacio Zeballos, donde se ubica el Penal de Socabaya.
A las 10:30 los obreros acudieron al gobierno regional para buscar una reunión con el gobernador Elmer Cáceres Llica. Pero estaba ocupado y tenía varias reuniones pendientes. Al final no fueron recibidos pero Cáceres Llica se comprometió a recibirlos el lunes.
Como forma de apoyo, los obreros sindicalizados de todas las obras acatan el paro convocado por Construcción Civil en contra de la empresa a cargo de obras en el penal.
Sin embargo, los que no están sindicalizados acuden normalmente. Esto no es bien visto y ayer un grupo lanzó piedras y amenazó a los obreros que estuvieron laborando en la construcción del hospital Maritza Campos, en el Cono Norte.