Rosa María Palacios marchó con la población por el adelanto electoral
Recorrido. Durante su trayecto de 5 kilómetros, que duró 3 horas, la gente le manifestó su afecto, habló con policías y ternas que detectó, y también firmó por el adelanto de comicios generales.
“¿Quién quiere protestar conmigo?”, fue el titular de la columna de la periodista de La República y líder de opinión Rosa María Palacios, que publicó el domingo pasado.
Compromiso que cumplió el 19 de julio por varios argumentos que expuso, como el adelanto de elecciones generales frente a un Gobierno que ha establecido una alianza con el Congreso que, en concreto, es quedarse en el poder. Asimismo, el descontento de la población y de los familiares de 49 personas muertas por proyectiles de armas de fuego por parte de las fuerzas del orden de este Gobierno, que desconoce y opta por la impunidad, además de un Congreso que destruye el Estado de derecho.
Pero la gota que rebalsó el vaso para Rosa María Palacios fue cuando el Ministerio de Cultura le abrió las puertas nada menos que a La Resistencia, un grupo extremista que se dedica a atacar instituciones, medios periodísticos, autoridades y ella ha sido una víctima más.
“Para mí la gota que rebasó el vaso fue ver a la gente de La Resistencia, que había venido a gritar a la puerta de mi casa, siendo recibidos por el exviceministro de Cultura y el Ministerio de Cultura. Me pareció ofensivo, no había más que decir, teníamos que salir a defender la democracia y la libertad de expresión”, dijo Palacios.
A la marcha
Durante tres horas y en un recorrido de 5 kilómetros, Rosa María participó de la gran manifestación de esta semana. Lo hizo junto a sus colegas Pedro Salinas y Josefina Townsend.
La sorpresa fue la gran cantidad de personas que la rodeaban para expresarle su afecto y, por supuesto, llevarse de recuerdo un selfie con ella. Desconocidos iban detrás de ella a paso firme. “Nos juntamos con muchísima gente, por supuesto, la gran mayoría que no conozco, pero que fue muy amable, muy cariñosa. Se nos unió mucha gente que caminaba detrás nuestro”, contó. Pero también detectó a varios ternas, quienes se delatan por su estilo de corte de pelo y sus mochilas.
Su trayecto empezó en la plaza Grau, para luego avanzar por la avenida Iquitos y terminar en la avenida Abancay.
PUEDES VER: Prisión preventiva EN VIVO: PJ suspenden audiencia de Mauricio Fernandini y Sada Goray al 24 de julio
“Todos tienen sus banderas peruanas, acá todos están pidiendo justicia para los fallecidos, adelanto de elecciones. Es una manifestación pacífica, grande, bien contundente, fuerte, y eso es lo que todos queremos. Que se vayan todos, es lo que piden todos acá”, declaró la periodista para el noticiero de LR+ Noticias al hacer un alto en la marcha. En el chat del noticiero reconocían su presencia en la manifestación, aunque también no faltaron los troles en su contra.
Hubo un medio de comunicación que se dedicó a sacarle fotos de forma inoportuna, cuando ya de regreso en el Jirón de la Unión hizo un alto con sus colegas en un restaurante.
Con el olfato periodístico que la caracteriza, detectó cómo la Policía no permitía que se hicieran fotografías en la plaza San Martín a las 7.00 p.m., hora en la cual hay una gran cantidad de manifestantes.
Durante el trayecto, se encontró con el Comité Ciudadano por el Referéndum, que viene recolectando firmas para el adelanto de elecciones generales. Así que estampó su firma y huella dactilar. También lo hizo Pedro Salinas.
“Desde la marcha, firmando por un adelanto de elecciones. El 80% del país en las encuestas pide un adelanto de elecciones. Lo único que pedimos es votar y volver a votar, es lo único que queremos”, afirmó en medio de la algarabía de mujeres que la rodeaban.
Y, como dijo en su columna, no fueron cuatro gatos los manifestantes presentes en el 19J, fueron miles de peruanos que fueron a marchar.
El dato
Infundio. No faltaron los ataques contra la periodista. Palacios contó que, como había anunciado por Radio Santa Rosa que iba a estar frente al Poder Judicial, su productor le contó que “seis mujeres habían sido entrenadas para decirle que Soros la financiaba”.
