Por Dr. José Luis Pérez-Albela. Dr. José Luis Pérez-Albela. www.drperezalbela.com Muchos agentes alérgicos y ambientales pueden ocasionar ataques asmáticos. Entre ellos se encuentran el polen, el polvo, el moho, la caspa de los animales, los detergentes, las sustancias petroquímicas, y las más determinantes y peligrosas son la contaminación atmosférica y el humo. Medidas sencillas como controlar el monóxido de carbono que emiten el 90% de las unidades de transporte de la ciudad podrían coadyuvar a controlar las cifras alarmantes de males respiratorios que incluyen el asma. Las ventajas del uso de métodos naturales en vez de tratamientos convencionales para el asma son evidentes. Los fármacos más comunes incluyen una sustancia derivada de la cortisona, que puede ocasionar trastornos como úlcera péptica, dolores de cabeza, irregularidades menstruales, entre otros. Los abordajes como la dieta y la nutrición han mostrado resultados positivos, sin efectos colaterales negativos asociados con los tratamientos farmacológicos. El mal no sólo se controla sino que desaparece. Además de eliminar los alimentos alérgicos, el Dr. Alan Gaby, M.D. presidente electo de la Asociación Americana de Medicina Holística en Estados Unidos, sugiere suplementar la dieta con nutrimentos como las vitaminas C, B6, B12, cloruro de magnesio, betacarotenos y selenio. Algo que ayuda a aliviar el asma es tomar una cucharada de aceite de oliva dos veces al día. En caso de ataque preparar una bebida de agua pura con una media cucharadita de sal de mar y de bicarbonato. Esto producirá un alivio inmediato. El Dr. Richard Firshein, director del Centro Firshein de Nueva York, ha conducido importantes investigaciones para tratar el asma. Autor de "Contrarrestando el Asma", "El programa Aliento de Vida: 7 pasos para alejar el asma y liberar al niño del asma", etc., concluye que numerosos estudios demuestran que el magnesio es un mineral clave en el tratamiento del asma, pues disminuye la "explosión" de glóbulos blancos que suele presentarse en el asma debido a la inflamación. Incluso es aplicado durante los ataques severos de asma. El efecto del magnesio no es tan diferente del de los broncodilatadores y esteroides, pero en vez de causar efectos laterales como sequedad de boca y nerviosismo, deja al paciente en calmado estado de bienestar. Existen muchos mitos respecto a los tipos de deportes y ejercicios más adecuados para una persona con asma. Por lo general, se toleran mejor las actividades con ejercicios de movimientos breves o períodos intermitentes de actividad, como marcha, vóleibol, gimnasia o béisbol. La natación, que implica respirar aire caliente y húmedo, es bien tolerada. Los deportes aeróbicos como las carreras de distancia, el fútbol o el baloncesto tienen más probabilidades de causar síntomas.