El informe final de la Comisión de Ética sobre la denuncia contra el congresista de Fuerza Popular Luis Cordero Jon Tay recomienda la suspensión del cargo. Ello, a raíz del reportaje de Panorama que dio a conocer el testimonio de la expareja de la fujimorista, quien acusa al legislador de agredirla física y psicológicamente, y acosarla a través de terceras personas.
De acuerdo con la parte resolutiva del referido informe, a la que accedió La República, la secretaría técnica aconseja a los miembros de la comisión aceptar la denuncia de oficio y elevar al hemiciclo la propuesta de interrumpir las funciones de Cordero Jon Tay por cerca de dos meses.
“Se recomienda que la Comisión apruebe el presente informe y declare fundada la denuncia de oficio presentada contra el congresista Luis Gustavo Cordero Jon Tay, por la vulneración de los artículos 1° y literal a. del artículo 4° del Código de Ética Parlamentaria y los literales e, g y j del artículo 3°, numerales 4.1 y 4.4 del artículo 4°, literales a, y b. del artículo 5° del Reglamento del Código de Ética Parlamentaria; y se recomienda al Pleno en aplicación del literal d) del artículo 14° del Código de Ética Parlamentaria la suspensión en el ejercicio del cargo y descuento de sus haberes de 60 días de legislatura”, dice el documento.
PUEDES VER: Fuerza Popular: ¿quiénes fueron los congresistas que visitaron a Alberto Fujimori en el penal Barbadillo?
Pese a las agresiones delatadas, el grupo de trabajo que lidera la acciopopulista Karol Paredes no investiga al fujimorista por dichos presuntos actos, sino por la “vinculación que habría de una tercera persona con el congresista denunciado que habría intimidado a la fémina identificada como la expareja del denunciado para que no siga con la denuncia presentada en los reportajes”.
Informe de calificación de la denuncia de oficio contra fujimorista Luis Cordero. Foto: documento
Incluso, en un inicio, la Comisión de Ética blindó a Luis Cordero alegando que los ataques tuvieron lugar antes de que asuma como legislador. Tras las críticas —y la difusión de las supuestas amenazas de un tercero— se reconsideró la decisión.