La revista The Economist, en su última edición, ha alertado al mundo de una futura crisis alimentaria. El economista Pablo Secada saludó la iniciativa del Gobierno de Pedro Castillo, quien ha aprobado un Decreto Supremo de Urgencia que autoriza al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) la adquisición en el mercado internacional de fertilizante nitrogenado (urea) por S/ 348 millones 887.735.
No obstante, advirtió que “no hay suficiente urea”, por lo que la salida no es comprar dicho elemento a países como Bolivia, Venezuela o Rusia a través de China e India.
En este sentido, aclaró que para los próximos meses se espera un menor rendimiento de productos de la sierra peruana como papa, trigo, camote y maíz.
Ante la posible crisis, expuso que algunas empresas peruanas ya han comenzado a hacer agricultura regenerativa, es decir, no usan agroquímicos en la tierra, sino productos orgánicos.
“En el Perú, tenemos la agricultura del feudalismo y la agricultura del sigo 21″, indicó.
Secada recordó que los economistas ya han dado una solución para que los peruanos no se vean afectados por esta crisis alimentaria. La recomendación consistía en hacer transferencias bancarias a las madres de familia de S/ 100 adicionales por mes. Esto, para que sea un apoyo a la canasta básica.
“Hay que hacer que las madres de los comedores también reciban una transferencia, pero al nombre de la señora y no de la municipalidad porque las ollas comunes no son unidades ejecutoras. Se publica en internet cuánto se le dio a la señora, las madres se encargarán de rendir cuentas”, detalló.
Agregó que la respuesta no estaba en la reducción del IGV de algunos productos, ya que dicha medida solo beneficiaría a las personas con ingresos altos o medios altos que, de acuerdo al especialista, no deberían recibir ningún tipo de apoyo del Estado.
“Es un momento de emergencia nacional como lo fue el Niño Costero o la pandemia. Si lo pensamos de la misma forma, algo aprendimos. El presidente, en vez de estar paseándose por el Perú, debería liderar este esfuerzo (...) No hay urea, tendrá que usarse lo que se pueda”, alegó.