El debe ser es que los candidatos regionales y municipales sean elegidos en elecciones internas. El plazo para organizar estos procesos vence el 22 mayo de acuerdo al cronograma electoral.
Sin embargo, advierten especialistas, es un mero trámite. La mayoría de partidos y movimientos regionales, al menos en Arequipa, ya tiene sus candidatos.
Una de las agrupaciones que anuncia con fuerza a su precandidato es Yo Arequipa, que cuenta con el exrector de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) Rohel Sánchez Sánchez como aspirante al sillón regional. El contador y docente de la Facultad de Economía quiere aprovechar el rédito de haber realizado una de las mejores gestiones en la UNSA. Aunque por el momento sin punto de comparación, porque las que le antecedieron fueron totalmente desastrosas.
Pero Yo Arequipa es un movimiento que tuvo problemas en la inscripción de sus militantes. El “salvavidas” del Congreso le permitió incorporar más de 3600 correligionarios. La agrupación elegirá a sus candidatos por delegados.
Este método que permite la ley electoral funciona así: supuestamente, los afiliados eligen una lista de delegados, representantes de provincias o distritos. Les dan el encargo de definir a los candidatos que serán inscritos ante el Jurado Nacional de Elecciones en junio.
Yo Arequipa tenía proyectada la elección de 109 delegados en todo Arequipa, pero tras el desastre de la inscripción de su padrón de afiliados redujeron a 16; dos por provincia.
Lo mismo harán otros 6 movimientos regionales: elección por delegados. Pero sus postulantes también ya están definidos y son los eternos candidatos regionales. Figuran Javier Ísmodes con Arequipa Tradición y Futuro, Gustavo Rondón Fudinaga y Víctor Hugo Rivera en Juntos por el Desarrollo, Benigno Cornejo Valencia por Arequipa Avancemos. Todos ellos ya están en campaña, con propaganda incluida. Revalora lanzó como postulante regional a Miluska Olivera, esposa del fundador del movimiento, Fredy Lozano.
Al respecto, el especialista en derecho electoral, Jorge Luis Mamani, indica que las actuales reglas de juego permiten que los movimientos puedan elegir a sus precandidatos prácticamente sin competencia o sin democracia. “Los mismo pasa con la elección por afiliados. Aunque parece más democrática no lo es, porque las organizaciones presentan una sola lista, así que al final no hay más que validar el trámite”, añade.
El especialista advierte que para este proceso se debieron usar las reglas de juego que se aprobaron en la reforma electoral que se hizo durante el gobierno de Martín Vizcarra Cornejo.
Estas incluían unas elecciones primarias en las que participaría la ciudadanía, lo que permitiría que se validen a las organizaciones y candidatos principales de cada agrupación política. Luego de eso, en las elecciones internas, solo se elegirían a los candidatos a regidores o consejeros. “Pero por la pandemia se suspendió este proceso, dejándolo para los siguientes comicios. También se dejó en suspenso el número mínimo de afiliados de las agrupaciones políticas, que era de 1% de la población nacional (para los partidos) y regional (para los movimientos). Con esto nos habríamos quedado solo con 3 partidos y tal vez con ningún movimiento”, añade.
Para Mamani lo único rescatable es la participación de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) en las elecciones internas. Asesoran a las organizaciones políticas. Este órgano da logística y capacitación a los comités electorales. Aunque la mayoría de agrupaciones tendrá una sola lista, el proceso igual es un mero cumplimiento de la norma.
Jorge Sumari Buendía, representante de Arequipa Tradición y Futuro, acepta que se acoplan a las reglas de juego. Indica además que los pocos afiliados con los que cuentan los movimientos regionales no les permite armar más de una lista. “La ONPE nos exige conformar listas en bloque; es decir candidatos a la región, provincias y distritos. Y elaborar dos es complicado”, añade.
Por su parte, el líder de Juntos por el Desarrollo de Arequipa, Víctor Hugo Rivera, acepta que las reglas de juego no son perfectas y se prestan para que las organizaciones sigan controlando por completo la elección de candidatos predeterminados. “En nuestro caso hemos optado por la elección mediante afiliados. Hemos dado carta libre para que se presenten listas, pero por el momento solo hay una, que es la que lidera Gustavo Rondón a la región y yo a la provincial. En mi caso, me presento porque así lo piden las bases y porque hemos trabajado duro los últimos 4 años”, explica.
Rivera hace hincapié en que son las instituciones electorales las que debieron hacer respetar las normas aprobadas en la reforma electoral. Admite que de haberse sometido al veredicto de la ciudadanía en elecciones primarias pocos habrían pasado y peor si se hubiese acatado el número mínimo de afiliados. “En Arequipa, los movimientos habríamos necesitado al menos 11 mil. Ninguna organización los tiene ahora. Nos salvó la pandemia”, finaliza.
El analista político Juan Carlos Rebaza, destaca también la falta de interés de la ciudadanía por tener una participación política activa, tanto para crear como para conformar agrupaciones políticas. “Es un asunto más profundo, de educación política. Esto es aprovechado por las organizaciones y políticos, quienes utilizan este vacío para prevalecer y controlar el poder y la economía nacional. Es un aprovechamiento indebido del sistema”, acota.
De igual forma piensa Héctor Herrera Herrera, abogado y precandidato al gobierno regional por Arequipa Avancemos. “Es el sistema que tenemos y nos adecuamos. Lamentablemente la población sigue con el chip de que entrar en política es mancharse o enlodarse. Así de mal está la política. Por eso nadie más quiere participar y seguimos con los mismos”, finaliza.