Luego de participar en el saludo y oración a la Virgen de la Candelaria, al premier Walter Martos le tocó escuchar los gritos y el llanto de la población de Puno, afectada por el coronavirus. En medio de reclamos airados y las lágrimas de las mujeres, el titular de la Presidencia del Consejo de Ministros intentó sosegar los ánimos apelando al diálogo.
La mañana de este sábado, Martos arribó a Puno junto a los ministros de Defensa, Jorge Chávez Cresta; de Salud, Pilar Mazzetti; y de Vivienda, Carlos Lozada. Su primera tarea fue supervisar el operativo Tayta así como las acciones que se han tomado hasta el momento contra la COVID-19.
Pero fueron los gritos de la población los que interrumpieron los actos protocolares que las autoridades de Puno habían organizado para recibir a Martos, y a los ministros. Un grupo de hombres expresó su furia contra la gestión del gobernador regional, Agustín Luque.
“¿Qué ha coordinado, señor gobernador? No hay nada. ¡La gente se está muriendo, esto es un saludo a la bandera!”, decían indignados, por lo que Walter Martos decidió escucharlos y les pidió conversar, alegando que de esa forma se pueden tomar decisiones. Además se comprometió a verificar los establecimientos de salud, para conocer las condiciones en las que son atendidos los pacientes afectados con la COVID-19.
Durante su recorrido por las céntricas calles de Puno, Martos y la comitiva trataron de atender y escuchar a todos aquellos que se acercaban implorando ayuda, ya sea porque requieren atención especializada para el coronavirus o debido a que por los efectos de la pandemia sobre la economía, literalmente no tienen nada que comer.
“¡Luque, miserable!, ¡Luque no trabaja nada! El presidente Vizcarra debe intervenir. Con Aduviri hubiera sido otra cosa, mejor que tú”, vociferaban las personas contra el gobernador de Puno, Agustín Luque, quien también participó del recibimientos a los representantes del Ejecutivo.
Y a pesar de los intentos de la Policía, las personas terminaron aglomeradas a la espera de poder hablar con las autoridades.
En los últimos días, así como ocurre en diversas regiones, Puno ha registrado un repunte en el número de casos de coronavirus. De acuerdo al último reporte de la Dirección Regional de Salud (Diresa) de la región altiplánica, hasta el 13 de agosto se contabilizaban 8 078 casos positivos y 308 personas fallecieron.