Walter Ríos Montalvo, el detenido expresidente de la Corte Superior del Callao y una de las principales figuras de la red de corrupción “Cuellos Blancos del Puerto”, buscará mañana que la Corte Suprema de Justicia le revoque la prisión preventiva, que cumple desde julio del 2018.
Para lograrlo, al igual que otros procesados que cumplen prisión preventiva, Ríos Montalvo aduce que su condición de salud previa, antecedentes de una enfermedad pulmonar, lo vuelven una persona de alto riesgo de contraer la COVID-19 y tener complicaciones que pondrían en riesgo su vida.
Es el mismo motivo que permitió la variación de la prisión preventiva por arresto domiciliario o comparecencia restringida a otros cinco procesados del caso Cuellos Blancos del Puerto que se encontraban en prisión desde mediados del 2018.
El exchofer de la Corte John Misha, los abogados Nelson Aparicio Beizaga y Jacinto Salinas Bedon, el operador político José Cavassa Roncalla y el exconsejero Julio Gutiérrez Pebe lograron que se varíe la prisión por arresto domiciliario, para evitar un contagio que podría ser fatal.
Sin embargo, su caso es distinto. Walter Ríos ha ido más allá, lo que ha causado preocupación en el Ministerio Público. Se ha presentado ante el juez supremo como un “importante” colaborador del Equipo Especial de fiscales del caso Cuellos Blancos del Puerto.
Si bien este es un tema del que ya se hablaba, que él revele esa posibilidad rompe los protocolos de reserva, confidencialidad y seguridad que rodea una colaboración.
La situación es tan preocupante, que el juez Núñez Julca ha advertido que en la audiencia vía teleconferencia solo se discutirán los motivos del cese de la prisión preventiva. Y no lo es la condición de colaborador eficaz. Además, eso obligaría a hablar de la información entregada para que puedan considerar su calidad e importancia.
El fiscal supremo Jesús Fernández Alarcón, a cargo del proceso contra Ríos, ha presentado un escrito al juez oponiéndose a la liberación de este procesado. Señala que no cumple ninguna de las condiciones prevista por la norma procesal para un cese de prisión preventiva.
Fernández Alarcón recuerda que Ríos Montalvo tiene un papel clave en la red “Cuellos Blancos del Puerto”, al ser considerado el cabecilla del grupo que operaba en la Corte Superior del Callao, con nexos en la Corte Suprema y el desactivado Consejo Nacional de la Magistratura (CNM).
Fue precisamente una llamada telefónica a su celular la que permitió a la Fiscalía contra el Crimen Organizado del Callao empezar a investigar y desentrañar una red de corrupción que se habían extendido por las cortes superiores de Lima y Callao, la Corte Suprema, el ex-CNM y la ONPE.
El Equipo Especial del caso Cuellos Blancos aún continúa revisando las llamadas telefónicas de los implicados en este caso, para conocer sus alcances e identificar a todos los integrantes.
La liberación de Ríos Montalvo podría afectar todo lo avanzado. Su excarcelación no va a ayudar con la destugurización de los penales, argumentan en la Fiscalía.
Al ser la colaboración eficaz un proceso reservado, en la Fiscalía no hablaron del tema para esta nota. Extraoficialmente, Ríos sí estaría brindando información, pero es por eso que consideran que es mejor que continúe en prisión.
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