Cuarenta policías, además de funcionarios, abogados, vigilantes, y maquinaria pesada de la empresa, llegaron a la comunidad Alto Huarca, en la provincia de Espinar, y pretendieron desalojar a los campesinos que viven en la zona adyacente al proyecto minero Antapaccay.,Exigen a la Policía Nacional y a minera Glencore que aclaren intervención violenta en comunidad cusqueña,Ese día, 3 de abril, las madres de familia y las ancianas de la comunidad se enfrentaron a la policía para defender sus viviendas y sus tierras. Los agentes respondieron con patadas e insultos. Tres mujeres, Rocio Huaquira, María Huaquira y Eufrosina Umasi, resultaron con heridas de consideración. PUEDES VER: Cumbre de las Américas: conoce los jefe de Estados y de Gobierno invitados Eufrosina Umasi declaró a Derechos Humanos Sin Fronteras que la empresa minera los viene hostigando para que le vendan sus terrenos y que de no aceptar la transacción será con el Estado. Ante este hecho la ONG CooperAcción emitió un pronunciamiento donde exige que los desmedidos actos de violencia perpetrados contra los pobladores de Alto Huarca sean explicados por la Policía Nacional y también por la empresa minera Glencore. Asimismo, solicita el inicio de investigaciones penales por el supuesto delito de abuso de autoridad, prevaricato y coacción contra las autoridades que se excedieron en sus funciones. “Nos solidarizamos con las víctimas de este nuevo accionar de violencia en contra de poblaciones que solo defienden sus derechos al territorio, al agua y a la vida”, señala en el documento.