Javier Milei, el ‘rockstar’ de los liberales: ¿tiene posibilidades de ser presidente de Argentina en 2023?
El crecimiento y popularidad de Milei ha generado preocupación en la oposición. Descubre quién es Javier Milei y qué posibilidades tiene de llegar a la Casa Rosada en 2023, de acuerdo a especialistas.
Javier Milei es un economista y diputado argentino que en los últimos años irrumpió en la política. En poco tiempo se ha convertido en el ‘rockstar’ de los liberales. Con un mensaje provocador se ha ganado el aprecio de muchos, el desagrado de otros y la preocupación de la “casta política”, como él suele referirse.
“No vine acá para guiar corderos, vine para despertar leones”, clama en uno de sus multitudinarios discursos en plazas públicas. Culpa a la “casta política” de todos los males que dañan a Argentina y finaliza gritando: “¡Viva la libertad, ca****!”.
Milei quiere ser presidente de Argentina y para ello tiene planeado “acabar con la casta política”, eliminar totalmente la obra pública, dolarizar la economía, cerrar el Banco Central, recortar el gasto público, disminuir a ocho los ministerios (contempla cerrar el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad), entre otras propuestas radicales.
En la siguiente nota analizaremos las posibilidades que tiene el polémico diputado y economista —dispuesto a romper el status quo— de convertirse en mandatario de Argentina, a poco menos de un año y con encuestas que lo respaldan.
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¿Quién es Javier Milei, el fenómeno electoral en Argentina?
Javier Gerardo Milei nació en Palermo, Argentina, hace 51 años. Además de economista, fue cantante de rock y exarquero de fútbol del Chacarita Juniors: esas son las tres pasiones más intensas que tiene, según su propia opinión. Su padre tenía un consorcio de colectivos y su madre era ama de casa.
Tiene una hermana llamada Karina, que lo acompaña a todas partes y que lo ha apoyado durante toda su campaña política. “Es un ángel, el ser más maravilloso del universo”, dijo alguna vez sobre ella.
Este es un caso atípico en la política argentina, acostumbrada a tendencias progresistas. Sin embargo, de acuerdo al analista político Diego Reynoso, de la Universidad de San Andrés: “Milei se para en dos dimensiones de la competencia política argentina: un eje Estado-mercado, donde él claramente se posiciona del lado del mercado, y un eje establishment-antiestablishment, donde él se para del lado antiestablishment”.
Y añade: “Es una combinación muy extraña porque, en general, los promercado son muy proestablishment, pero él se para en el anti-establishment-mercado y desde ahí está tratando de apelar a dos tipos de electorados: aquellos que no quieren presión estatal y aquellos que están hartos de la vieja clase política”.
La pandemia por la COVID-19 cambió muchas cosas en el mundo, pero también a las personas: Milei pasó de ser un analista y divulgador libertario para convertirse en un protagonista de constantes interpelaciones al poder. Poco a poco construyó un personaje que era perfecto para el contexto de gran malestar social, el cansancio y aburrimiento de los argentinos, agravado por la inflación y las malas decisiones del Gobierno de Fernández.
El político postuló y quedó en tercer lugar en las elecciones para diputados nacionales por la ciudad de Buenos Aires. A poco menos de un año de las presidenciales, él ha reiterado: “Yo voy a ser presidente de la nación”.
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¿Javier Milei tiene posibilidades reales de ser presidente de Argentina en 2023?
América Latina atraviesa una etapa única y difícil, en opinión del analista internacional Daniel Zovatto. “El sistema político está roto y viene acompañado de un gran nivel de malestar social, que ya se había expresado en el segundo semestre del año 2019. Luego se vio agravado en el 2020, (...) se fueron acumulando en el 2021 y, en el 2022, esto está potenciado por una profunda crisis de representación, de falta de confianza de la ciudadanía con las elites tradicionales y un crecimiento económico totalmente insuficiente”, apunta.
Esta situación ha afectado a los partidos políticos tradicionales y abre “la puerta para estos liderazgos con discursos antisistema que estamos viendo en Argentina”. “La gran sorpresa es el caso del liderazgo de Milei y lo que habría que ver ahora es el rendimiento electoral”, asegura Zovatto.
Respecto a ello, de acuerdo a una encuesta realizada por CB Consultora, el ‘rockstar’ superaría al Frente de Todos, partido de Cristina Fernández y Alberto Fernández, y se posicionaría en el segundo lugar en las elecciones presidenciales.
Florencia Filadoro, directora de la consultora Reyes Filandoro para Economía y Política, señala que “el desafío de Milei es sostener su ascenso y darle contenido sin desdibujarse”. “Aún no vemos el techo de Milei, pero ya se encontrará”, añade.
Sin embargo, para el analista internacional Ramiro Escobar, “sería un candidato muy difícil” y el panorama no es tan claro. Además, tendría mucha resistencia de los sectores que ven con horror sus propuestas de eliminar el Ministerio de la Mujer y recortar derechos que ya han ganado.
“Si bien puede parecer habitual que haya candidatos de ese talante, no creo que sea tan fácil que avance porque el peronismo sigue siendo fuerte a nivel social (...). Hay gente peronista que puede estar en desacuerdo con Fernández, pero —además de una fuerza política— hay una fuerza social (...). El peronismo con algunas izquierdas resistirían mucho una candidatura de Milei”, considera el especialista.
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De igual manera, Escobar precisa que, en Argentina, los sindicatos son fuertes y una propuesta para reducir más el estado y hacer una economía ultraliberal ocasionaría mucha oposición. A su vez, los cambios radicales que propone Milei (dolarización, cierre del Banco Central, etc.) no son del todo viables en una sociedad como la del país sudamericano.
“Argentina no es una sociedad pasiva, es muy activa políticamente, con aparatos sociales grandes y todavía influyentes. (...) Unas reformas de ese tipo son muy difíciles de hacer. Esto se pueden hacer cuando un país recién se está creando, pero en un país como Argentina, con fuertes sindicatos, con derechos adquiridos, con un aparato estatal grande, proponer una reducción al mínimo de los ministerios, el Estado, es inviable. No ha ocurrido ni en Estados Unidos con Trump”, concluye el especialista.
