DoNotPay, autodenominado como ‘el primer abogado robot del mundo’, y su creador Joshua Browder se enfrentan a una demanda colectiva realizada por un bufete de abogados en Chicago, Estados Unidos. Los letrados señalan que el robot, que trabaja a través de la inteligencia artificial, no cuenta con un título universitario en Derecho o un permisos que le permita ejercer la defensa legal de alguien.
Meses atrás, DoNotPay presentó un servicio de chatbot —basado en la tecnología de ChatGPT— que es capaz de negociar facturas en nombre del solicitante. Tras ver el éxito obtenido, se anunció que se le pagaría a un millón de dólares a cualquier abogado que aceptase usar unos AirPods en la corte suprema, mientras repite los argumentos del robot.
Tras el anuncio, los demandantes consideraron que existe un vacío legal por el uso del robot con inteligencia artificial. “Desafortunadamente, para sus clientes, DoNotPay no es en realidad un robot, un abogado ni un bufete de abogados. DoNotPay no tiene un título en Derecho, no está prohibido en ninguna jurisdicción y no está supervisado por ningún abogado”, afirmaron.
En su defensa, el creador de DoNotPay, Joshua Browder, informó en sus redes sociales que no temen por las consecuencias de la demanda o un posible juicio. “Tenemos los recibos, no tenemos nada que ocultar y nos defenderemos. Incluso, podemos usar nuestro abogado robot en el caso”, aseguró.