Colombia ha dado un paso sin precedentes en América Latina con el lanzamiento de un bono de biodiversidad de US$50 millones, liderado por Davivienda y la Corporación Financiera Internacional (IFC). Este innovador bono, que es el segundo de su tipo en el mundo, busca financiar proyectos dedicados a la protección y restauración de la biodiversidad. La emisión cuenta con el apoyo del Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Ambiente, y su propósito es atraer inversionistas interesados en respaldar iniciativas de conservación en ecosistemas claves del país.
El bono de biodiversidad marca un momento decisivo para Colombia, ya que también promueve la economía verde en la región. Con esto, la nación cafetera fortalece su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y apuesta por un modelo de crecimiento basado en la naturaleza.
Este bono de biodiversidad pretende atraer la inversión internacional a proyectos de conservación en América Latina. Foto: Radio Nacional de Colombia
El bono de biodiversidad de Davivienda, con una inversión inicial de US$50 millones, es un hito en la financiación de proyectos ecológicos en América Latina. Según Javier Suárez Esparragoza, presidente de Davivienda, esta emisión permitirá respaldar proyectos que protejan la biodiversidad y restauren ecosistemas críticos, en especial manglares. Además, se busca mitigar el cambio climático y conservar los recursos naturales.
Esta subvención llega en un momento crucial para la economía y el medio ambiente en Colombia, ya que financiará una amplia gama de iniciativas que incluyen la agricultura regenerativa, reforestación, y la producción sostenible de agua dulce y marina.
La emisión fue liderada por una alianza entre un banco importante de la región y la Corporación Financiera Internacional (IFC), miembro del Grupo Banco Mundial. Foto: IFC
Los fondos del bono de biodiversidad se destinarán a proyectos que busquen la protección y restauración de áreas sensibles y en riesgo en Colombia. La lista incluye:
Los fondos se destinarán a iniciativas como la agricultura regenerativa, la reforestación de manglares y la producción sostenible de agua dulce y marina. Foto: Observatorio de Bosques de Antioquia
Davivienda también ha anunciado que busca que al menos el 10% de los recursos del bono se destinen a proyectos específicos de restauración de manglares en el Pacífico colombiano. Estas iniciativas, además de proteger la biodiversidad, beneficiarán a comunidades locales mediante la generación de empleos verdes y la mejora de la calidad de vida en zonas rurales.
Con el respaldo del IFC, esta emisión marca un hito en Colombia y América Latina. El IFC, miembro del Grupo Banco Mundial, espera que esta iniciativa inspire a otras entidades a explorar opciones de financiamiento sostenible como el bono de biodiversidad en el Caribe y la región.
Alfonso García Mora, vicepresidente de IFC para Europa, América Latina y el Caribe, expresó su optimismo sobre el impacto de esta emisión en el fortalecimiento de los mercados de finanzas sostenibles en la región. “Más de la mitad del PIB del mundo depende de actividades relacionadas con la naturaleza. Iniciativas como esta son clave para fortalecer la economía verde y preservar la biodiversidad en América Latina”, afirmó García Mora.