El conflicto entre Israel e Irán ha escalado a niveles de guerra tras el reciente ataque lanzado por Irán contra el territorio israelí en represalia por el asesinato de líderes de Hezbolá y Hamás. Israel con Estados Unidos como aliado han amenazado con responder de manera contundente a esta agresión.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó el ataque con más de 200 de misiles de Irán contra Israel como un "grave error" y aseguró que Teherán "pagará" el precio de la agresión."Quien nos ataca, le atacamos", advirtió. Asimismo, el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, advirtió que el ataque iraní no quedará impune y que Israel tiene planes para actuar en consecuencia.
Irán advirtió que lanzaría un ataque aún más contundente si Israel cumplía sus amenazas, haciendo caso omiso a los llamados internacionales a la desescalada en un conflicto que ya ha cobrado la vida de más de mil personas en Líbano desde la semana pasada.
Por su parte, el jefe del Estado mayor iraní, general Mohammad Bagheri, respondió con una advertencia de bombardear todas las infraestructuras israelíes en caso de un ataque a su país. Mientras tanto, la fuerza aérea israelí continuó con bombardeos en Oriente Medio, incluyendo objetivos de Hezbolá en Beirut.
Estados Unidos expresó su total apoyo a Israel y se comprometió a coordinar una respuesta conjunta con el país ante Irán. El presidente Joe Biden afirmó el respaldo total de Estados Unidos a Israel en esta situación de tensión.
Ante esta escalada de hostilidades, el Consejo de Seguridad de la ONU convocó una reunión de urgencia para discutir la situación en la región, que se encuentra marcada por conflictos entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza, así como incursiones israelíes contra Hezbolá en Líbano. La situación se mantiene en un estado de alerta y tensión en medio de amenazas y acciones militares por parte de las partes involucradas.
El ejército israelí informó la pérdida de ocho soldados en enfrentamientos con Hezbolá en el sur de Líbano, donde llevaron a cabo una incursión terrestre para atacar posiciones del movimiento proiraní.
Los enfrentamientos tienen lugar en un contexto de tensiones crecientes entre Israel e Irán, siendo este último responsable del segundo ataque directo en su historia contra el Estado hebreo el martes.
Israel continúa bombardeando los suburbios del sur de Beirut, bastión de Hezbolá, donde la semana pasada infligió un duro golpe a esta milicia al eliminar a su líder, Hasán Nasralá, en un ataque masivo. Por otro lado, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) informó que al menos dos personas fallecieron en un ataque israelí en Damasco.
Hezbolá afirmó haber repelido a los soldados israelíes en el sur de Líbano y aseguró haber atacado una unidad israelí con un artefacto explosivo que destruyó tres tanques.
El ejército libanés confirmó que soldados israelíes llevaron a cabo dos breves incursiones antes de retirarse, y señaló que uno de sus soldados resultó herido en un ataque israelí con un dron.
Las autoridades militares israelíes instaron a los habitantes a evacuar más de 20 áreas del sur de Líbano. Por su parte, una fuente de seguridad libanesa informó que Israel bombardeó repetidamente los suburbios del sur de Beirut durante la noche. Testigos presenciales escucharon una veintena de explosiones en esa zona.
"Desde hace varios días, el barrio se convirtió en una ciudad fantasma", relató Mohamad Sheaito, uno de los pocos residentes que optó por quedarse.