El papa Francisco condenó un uso "inmoral" de la fuerza en Líbano y en Gaza, y pareció pedir moderación a Israel, el domingo al regreso de su visita a Bélgica.
Preguntado a bordo del avión sobre las consecuencias para los civiles de los bombardeos israelíes en Gaza y Líbano, el pontífice respondió: "Un país que utiliza la fuerza para actuar de esta manera, sea el país que sea, que actúa de una manera tan excesiva, [se presta a] acciones inmorales".
"La defensa siempre debe ser proporcional al ataque. Cuando no es el caso, surge una tendencia dominante que va más allá de la moral", respondió el jesuita argentino, de 87 años, a la pregunta de una periodista estadounidense.
"Incluso en la guerra, hay una moral que defender. La guerra es inmoral, pero las reglas de la guerra indican una forma de moralidad", agregó Francisco.
"Cuando eso no ocurre, vemos la 'malasangre', como se dice en Argentina", concluyó.
El ejército israelí llevó a cabo el domingo decenas de nuevos ataques contra Hezbolá en el vecino Líbano, dos días después de matar a su líder, Hasán Nasralá.
Tras oficiar la misa dominical en el estadio nacional de Bruselas, el papa expresó su "dolor" por la escalada del conflicto en Oriente Medio y pidió un alto el fuego inmediato en Líbano.
Respecto al conflicto en curso en la Franja de Gaza, el pontífice repitió que habla por teléfono "todos los días [con] la parroquia de Gaza" y que está informado de las "crueldades que ocurren allí".
El Ministerio de Salud de Gaza, gobernada por el movimiento islamista Hamás, anunció este domingo un nuevo balance de 41.595 muertos en este territorio palestino desde que comenzó la guerra con Israel hace casi un año.
Según el comunicado, 96.251 personas han resultado heridas desde el 7 de octubre, cuando se desencadenó el conflicto tras el mortífero ataque de Hamás en el sur de Israel, que dejó 1.205 muertos.
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