En el megatemplo cristiano Lakewood, ubicado en Texas, Estados Unidos, un incidente de tiroteo provocó heridas a dos individuos, incluyendo a un menor. El suceso fue confirmado por las autoridades policiales de la localidad. El superintendente de la Policía de Houston, Troy Finner, detalló que una mujer de 30 o 35 años llegó a la entrada del santuario, que tiene una capacidad para 16.800 asistentes, alrededor de las 2.00 p. m. del domingo 11 de febrero de 2024, cargada con un "armamento largo".
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La agresora, acompañada de un niño de 4 o 5 años y cuya relación con ella no se precisó, abrió fuego y fue neutralizada por dos agentes policiales que se encontraban de servicio en el lugar. Durante el enfrentamiento, un niño resultó gravemente herido y se encuentra en estado crítico, mientras que un hombre de 57 años que no estaba involucrado directamente en el incidente recibió un disparo en la pierna. La atacante, que portaba una mochila, mencionó la posible presencia de un explosivo antes de ser abatida, pero tras una inspección exhaustiva, no se encontró ningún artefacto.
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Hasta el megatemplo cristiano llegaron las autoridades, pero el lamentable hecho dejó víctimas. Foto: Economista
Testigos del incidente describieron escenas de pánico y confusión. Una testigo narró a KHOU, una cadena de televisión local, cómo la gente huía del lugar al escuchar los disparos y cómo se refugió en un cuarto bajo las instrucciones de un voluntario de la iglesia; otros se resguardaron en los baños y bloquearon las puertas con muebles. Destacó la preocupación de los padres por sus hijos presentes en los pisos superiores del edificio, y cómo todos pusieron su fe en manos divinas durante el caos.
La iglesia Lakewood, fundada en 1959 por el telepredicador John Osteen y actualmente dirigida por su hijo Joel Osteen, es conocida por sus servicios religiosos que alcanzan a millones de fieles. Osteen, quien evita participar en debates políticos, expresó su gratitud por que el tiroteo no coincidiera con el servicio principal.
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Este suceso se inscribe en el contexto más amplio de la problemática de los tiroteos masivos en Estados Unidos, un país donde la cantidad de armas supera a la de sus habitantes y donde existe un debate persistente sobre la regulación de la posesión. Incluso, las encuestas indican que una mayoría de estadounidenses favorece medidas de control más estrictas, las cuales han sido obstaculizadas por la influencia de los grupos de presión a favor de las armas.