Cargando...
Mundo

Mujer se casa con ella misma tras ahorrar 20 años para su boda soñada: "¿Por qué iba a perdérmelo"

Sarah Wilkinson invirtió los ahorros de su vida para celebrar una ceremonia consigo misma. “Ese dinero estaba reservado para mi boda, estaba ahí y por qué no usarlo para algo que quiero hacer”, aseguró. 

larepublica.pe
Sarah usó un tradicional vestido blanco de lentejuelas, una torta con una figura de novia besando una rana y su madre la acompañó hacia el altar. Foto: AB Studio Creative

Una mujer soñaba con casarse y ahorró durante 20 años para su boda; sin embargo, no encontró una pareja para dar ese paso. Esto no le quitó el entusiasmo y decidió celebrar su matrimonio con ella misma en una ceremonia a la que invitó a sus familiares y amigos.

Sarah Wilkinson, de 42 años, se casó consigo misma en Felixstowe, Inglaterra. La mujer aseguró que durante 20 años había ahorrado dinero de forma mensual para su boda. Incluido un premio de bingo que ganó. Gastó en total cerca de 10.000 libras esterlinas para la fiesta.

“Fue un día precioso para ser el centro de atención”, señaló Sarah, quien es controladora de créditos. “La ceremonia no fue una boda oficial, pero tuve mi boda (…). Yo creo que llega un punto en el que piensas 'puede que no tenga esto con una pareja a mi lado, pero ¿por qué iba a perdérmelo?'”, añadió la señora Wilkinson, en diálogo con BBC News.

La celebración se realizó en dos tiempos, primero contó con cerca de 40 amigos y familiares, la segunda parte fue en la noche con otras 40 personas en un club de tenis situado en el mismo espacio. “Nadie paró de sonreír durante todo el día y todos dijeron lo asombroso que lo pasaron”, recordó la mujer. “Casi todos dijeron ‘esto es algo que Sarah haría’”, acotó.

¿Por qué Sarah Wilkinson decidió casarse con ella misma?

La ciudadana inglesa escribió 14 votos para ella misma, el primero de ellos fue no ceder el control remoto del televisor. La idea surgió cuando cumplió 40 años durante la pandemia del coronavirus, en ese momento se compró el anillo de diamantes que tanto había querido.

Para su día especial, utilizó un tradicional vestido de lentejuelas, una torta con una imagen de novia besando a una rana, y su madre la acompañó en el camino hacia el altar.

El evento fue organizado por Katherine Cresswell, una de las mejores amigas de Sarah que se dedica a organizar bodas. “No solo se trataba de Sarah, sino también de reunir a todo el mundo (…). Siempre es necesario celebrar, y creo que lo necesitamos más que nuca”, dijo.