Cargando...
Mundo

Israel en crisis: inician protestas por cese de ministro que se opuso a reforma judicial de Netanyahu

Más de medio millón de israelíes colmaron las calles para manifestarse tras el cese del ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien se opuso al avance de la polémica reforma judicial del primer ministro, Benjamín Netanyahu.

larepublica.pe
En Israel hay protestas cada semana por una reforma judicial impulsada por el primer ministro. Foto: AFP

Más de medio millón de israelíes llenaron las calles este domingo para manifestarse en contra del cese del ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien se convirtió ayer en el primer miembro del Gobierno en oponerse públicamente al avance de la polémica reforma judicial impulsada por el primer ministro, Benjamín Netanyahu.

Las manifestaciones, que según medios locales concentraron a más de 600.000 personas y podrían ser las más multitudinarias hasta el momento, tuvieron lugar en distintos puntos del país, sobre todo en las ciudades de Tel Aviv y Jerusalén.

En Tel Aviv, los manifestantes bloquearon el tráfico de la principal arteria de la ciudad, portando banderas israelíes y al grito de "Democracia, democracia". En Jerusalén, grandes grupos rompieron uno de los cordones de seguridad en torno a la residencia del primer ministro y se enfrentaron con la Policía.

En paralelo, se registraron también multitudinarias manifestaciones de norte a sur del país, incluyendo grandes concentraciones en las ciudades de Haifa, en el norte del país, y Beer Sheva, en el sur.

El rechazo al despido de Gallant por parte de Netanyahu se expandió rápidamente por múltiples esferas de la sociedad israelí, incluyendo los sindicatos, que según medios locales podrían anunciar mañana una importante huelga.

Además, las universidades del país anunciaron que interrumpirán las clases a partir de mañana y un grupo de alcaldes y líderes municipales anticiparon que llevarían a cabo una huelga de hambre.

¿De qué trata la polémica reforma judicial de Benjamín Netanyahu?

Las movilizaciones se suceden cada semana desde la presentación en enero por parte del gobierno de Benjamin Netanyahu, uno de los más derechistas de la historia de Israel, de un proyecto de reforma que divide al país.

La reforma busca incrementar el poder de los parlamentarios sobre el de los magistrados, lo que, según sus detractores, pone en peligro el carácter democrático del Estado.

La reforma ha suscitado críticas dentro y fuera del país. El principal aliado de Israel, Estados Unidos, ha expresado su "preocupación" por la reforma. Netanyahu, que hasta ahora había mantenido un perfil bajo sobre este tema, anunció el jueves que iba a hacer avanzar la reforma, pero que haría todo lo posible para "alcanzar una solución" aceptable, tanto para los partidarios como para los críticos del proyecto.

La justicia israelí advirtió al primer ministro de de que no puede intervenir en el proceso de adopción del cambio legislativo, ya que sería "ilegal".