Nuevas pistas salen a la luz sobre el hallazgo de 53 migrantes muertos dentro de un camión en San Antonio, Texas, el pasado lunes 27 de junio. El conductor del vehículo no sabía que el aire acondicionado había dejado de funcionar, según documentos judiciales.
Homero Zamorano (45), quien fue encontrado escondido entre los arbustos a pocos metros del ‘camión de la muerte’, trató inicialmente de hacerse pasar por uno de los sobrevivientes, explicaron las autoridades mexicanas.
Pero la Policía logró identificarlo gracias a las fotos que lo mostraban conduciendo por el puesto de control de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. en Laredo, Texas. Actualmente, el chofer se encuentra detenido.
Zamorano y el presunto conspirador Christian Martínez, de 28 años, están acusados de enviarse mensajes de texto antes y después de que se encontrara el vehículo, de acuerdo con documentos de la corte federal.
Martínez supuestamente dijo: “El conductor no sabía que la unidad de aire acondicionado dejó de funcionar y esa fue la razón por la cual las personas murieron”.
Ambos sospechosos enfrentan la pena de muerte si son declarados culpables de los cargos de contrabando y conspiración.
La víctima pidió que se comuniquen con alguien que los rescate, pues llevaban 3 días y 3 noches en el tráiler. Foto: captura/WRadio
Otros dos hombres acusados de estar involucrados, Juan Claudio D’Luna-Méndez y Francisco D’Luna-Bilbao, han sido acusados de posesión de armas de fuego y de estar ilegalmente en EE. UU. Ambos son ciudadanos mexicanos.
Las víctimas incluyen 27 ciudadanos mexicanos, 14 hondureños, siete guatemaltecos y dos salvadoreños. Varios niños aún están siendo tratados en el hospital.
Las autoridades mexicanas informan que en total fueron 67 migrantes los que estaban en el medio de transporte, mientras que los fiscales en San Antonio aseguran que fueron 64.
La tragedia en San Antonio es el caso de tráfico de personas más mortífero en la historia de Estados Unidos.