El expresidente de Colombia Álvaro Uribe (2002-2010) sugirió una amnistía general como una forma para lograr que el país avance hacia la paz total y que pueda abandonar la polarización política. Su propuesta ha generado debate en el espectro político.
La iniciativa tuvo lugar el domingo en una reunión no oficial con el presidente de la Comisión de la Verdad, el sacerdote jesuita Francisco de Roux, en la que dijo que “este país de pronto va a necesitar una amnistía general, casi que un borrón y cuenta nueva”.
Posteriormente, en una entrevista que brindó a la emisora local BluRadio este miércoles, sostuvo que esto no implicaría impunidad porque esa situación podría abrir ciclos de violencia.
La “asimetría en la justicia exige una amnistía general”, dijo Uribe, quien en otras oportunidades ha expresado su inconformismo porque haya militares en la cárcel por delitos cometidos durante el conflicto armado, mientras los exjefes de la guerrilla están libres y ocupan sitios en el Parlamento.
Pese a que el exmandatario sostiene que la amnistía es una idea antigua suya y que va de la mano con acabar la corrupción y el narcotráfico, insistió en que no tiene definido ningún mecanismo, sino que se trata de una idea que pensó cuando le preguntaron qué hacer para lograr la paz total.
Desde el Partido Conservador, aliado del uribismo, el senador Mauricio Delgado recordó que esta posibilidad se ha propuesto en el pasado sin éxito, pero que debería analizarse. “Con esto lograríamos mirar sin odio, sin rencores y sin resentimiento a otros actores del conflicto que han generado dolor”, apuntó el congresista.
Iván Cepeda, senador de izquierda y férreo opositor de Uribe por no apoyar el acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC, fue enfático en señalar que no se puede aplicar en delitos de lesa humanidad.
“Si él quiere amnistía general, las condiciones son claras: crímenes contra la humanidad no son amnistiables y la verdad es una condición insoslayable. Esa verdad que precisamente él ha querido negar y que se resiste reconocer”, escribió en redes sociales.
Por otro lado, el senador y excandidato presidencial Gustavo Petro, también duro crítico de Uribe, estuvo de acuerdo con la idea de la amnistía por tratarse de un “perdón social e histórico” que sería fundamental. No obstante, indicó que antes de ella tendría que “haber una devolución de todos los bienes a los despojados y verdad completa”.