El fundador de Tesla y de la compañía aeroespacial SpaceX, Elon Musk, espera tener medio millón de usuarios activos en su red de internet Starlink en un año y hará “todo lo posible” para lanzar en los próximos meses el primer vuelo orbital no tripulado del cohete Starship, según dijo este martes 29 de junio.
El magnate de origen sudafricano intervino en una charla en la segunda jornada del Congreso Mundial de Móviles (MWC, en sus siglas en inglés) de Barcelona (noreste español), en el que participó de forma virtual desde California (EE. UU.).
Según Musk, la red Starlink ―que se propone suministrar internet de alta velocidad, constante y asequible en cualquier lugar del mundo a través de satélites— ha superado recientemente los 70.000 usuarios y espera crecer exponencialmente hasta alcanzar el medio millón de clientes en unos doce meses.
Hasta la fecha, recordó, ya han lanzado más de 1.500 satélites, que pueden cubrir prácticamente todas las regiones del planeta, especialmente las más inhóspitas; y el objetivo es intentar efectuar un lanzamiento orbital de Starship dentro de los próximos meses.
“En agosto deberíamos tener conectividad global para todas partes del mundo, excepto los polos”, auguró.
Musk explicó que Starlink cubrirá las zonas a las que no llega fibra de internet o la tecnología 5G, y en las que “hay necesidad de conectividad”, pero es “limitada o cara”.
“El año que viene comenzaremos a lanzar la versión dos de nuestro satélite. Comenzaremos a llevar nuestras puertas de enlace y puntos de presencia directamente a nuestros centros de servidores. No queremos tener demasiada confianza, pero parece que será bastante positivo para las principales empresas de telecomunicaciones, fibra y 5G “, agregó.
El empresario también precisó que los terminales de Starlink cuestan en estos momentos unos 500 dólares en cualquier país del mundo —sin contar impuestos o tasas de importación―, aunque se está trabajando para dar con dispositivos más baratos.
“Honestamente, estamos perdiendo dinero en ese terminal en este momento, que cuesta más de 1.000 dólares de producir”, incidió, tras explicar que el servicio de internet tiene un precio de cien euros mensuales y que cualquiera puede instalarlo para tener conexión en unos cinco minutos: “Apunta al cielo y enchúfalo”, sintetizó.
Asimismo, precisó que la inversión que requiere Starlink varía entre los 5.000 y los 10.000 millones de dólares, aunque, con el tiempo, recalcó, la cantidad podría ascender hasta los 20.000 millones de dólares: “¡Bastante dinero!”, exclamó.
Por otro lado, indicó que SpaceX nació para lograr que la vida pueda ser “multiplanetaria”, con la principal misión de “expandir el alcance de la conciencia más allá de la Tierra para que podamos aumentar las oportunidades de que el futuro sea bueno”.
Para ello, resaltó, es necesario mejorar “drásticamente” la tecnología de las naves espaciales: “El santo grial son los cohetes confiables y rápidamente reutilizables. Con el Falcon 9 hemos conseguido la usabilidad más eficiente de cualquier cohete hasta la fecha con impulsores que ahora han volado ya 10 veces”.
En este sentido, sostuvo que la tecnología que se está implementando es “muy avanzada” y parte de un punto de vista distinto al que habitualmente se utiliza.
“La tecnología espacial tiende a ser tecnología antigua que se ha demostrado que funciona sobre el terreno. Nosotros tomamos el enfoque opuesto y nos arriesgamos. Es justo ver que tenemos la tecnología de rayos espaciales más avanzada fuera de las Fuerzas Armadas”.
Musk confesó que su trabajo se basa en la filosofía de que “no sabemos cuáles son las respuestas o qué preguntas hacer, pero si podemos expandir nuestro alcance de conciencia, sabremos mejor qué preguntas hacer sobre el universo”.