La dictadura de Daniel Ortega continuó el miércoles con los arrestos de líderes de oposición, que incluyen a cuatro aspirantes a la presidencia de Nicaragua, mientras Estados Unidos sancionó a cuatro asesores del mandatario, incluida su hija Camila Antonia Ortega Murillo.
El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió a Nicaragua la liberación de los líderes de la oposición que han sido detenidos en los últimos días y la restitución de sus derechos políticos.
El Gobierno español también pidió la “liberación inmediata” de los precandidatos a las elecciones presidenciales de Nicaragua “detenidos, encarcelados o retenidos” —Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro—, así como de “otros opositores”.
Tras esas detenciones, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos decidió sancionar a Camila Antonia Ortega Murillo, hija de Ortega que dirige el evento de modas Nicaragua Diseña y la Comisión Nacional de Economía Creativa; al presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes; y al jefe del grupo parlamentario sandinista, Edwin Castro.
También al general de brigada Julio Modesto Rodríguez Balladares, director ejecutivo del Instituto de Previsión Social Militar (IPSM), el brazo financiero del Ejército de Nicaragua.
Como resultado de las sanciones quedan congelados todos los bienes que los implicados pudieran tener en EE. UU. y se les prohíbe hacer cualquier negocio con norteamericanos.