Este sábado 6 de marzo, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y la primera dama, Cilia Flores, recibieron la primera dosis de la vacuna rusa Sputnik V contra el coronavirus, como parte del plan de vacunación del país.
El medicamento ruso es aplicado desde la semana pasada, cuando empezó la inmunización del personal de salud de Venezuela. Según Maduro, su Gobierno —que recibió 100.000 dosis de la Sputnik V, de las 10 millones que encargó— tiene la meta de vacunar al 70% de la población hacia finales de año.
La primera fase incluye, además, a personal policial y militar, así como a los diputados del Parlamento de mayoría chavista y otras autoridades. Los ancianos, entre la población más vulnerable, no fueron mencionados en el plan anunciado el miércoles por Maduro, que espera que la vacunación masiva se produzca hacia abril.
“Vamos con el favor de Dios y la ciencia rusa”, expresó a teleSUR el presidente venezolano mientras se le aplicaba la inyección junto con su esposa. También resaltó la eficacia de la vacuna rusa, que ya se ha aplicado en “cerca de 40 países”.
Venezuela, que participó en los ensayos clínicos de la Sputnik V, invirtió 200 millones de dólares en las 10 millones de dosis. La nación se encuentra entre las 37 de Latinoamérica y el Caribe que recibirán vacunas anticovid a través del sistema Covax, impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para garantizar la distribución equitativa de inmunizaciones contra el coronavirus en el mundo.
El organismo regional de la OMS, la Organización Panamericana de la Salud, ha pedido a Venezuela un adelanto de 18 millones de dólares para asegurar una reserva de entre 1,4 y 2,4 millones de dosis de AstraZeneca en el marco de Covax.
El Gobierno de Maduro negocia para acceder a recursos en el extranjero que están bloqueados, y cuyo control recae en el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente interino del país por medio centenar de países.
El gobernante venezolano evocó la posibilidad de obtener una “combinación” de vacunas, incluyendo la china y la cubana, que está aún en fase de ensayos.
Con casi 30 millones de habitantes, Venezuela suma 134.319 casos confirmados y 1.297 muertes por COVID-19, según cifras oficiales, cuestionadas por organizaciones como Human Rights Watch.
Con información de AFP.