El ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido anunció este martes que las islas Malvinas, territorio considerado por ellos como británico, quedó completamente limpio de minas antipersonales, 38 años después de la guerra que enfrentó al país europeo con Argentina por la soberanía de dicho archipiélago.
En 1982, el ejército argentino instaló en las islas unas 20.000 minas antipersonales y 5.000 minas antivehículos para proteger sus posiciones. Una vez que el Reino Unido recuperó el control sobre el territorio, inició un proceso de desminado que no tardó en detenerse debido a una serie de accidentes, tras los cuales se rodeó con vallas y señalizó los campos minados.
Según explica la cancillería, el programa de desminado financiado por el Reino Unido y lanzado en 2009, “ha completado su peligrosa misión de limpiar las islas del Atlántico Sur tres años antes de lo previsto”. El acceso a las playas será irrestricto y en ellas se podrán jugar partidos de fútbol y cricket.
Un equipo de Zimbabue bajo supervisión británica fue el encargado de estas labores. De esta forma, el Reino Unido cumple con sus obligaciones en virtud de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonales.
Ante esta noticia, el gobierno argentino indicó que el Reino Unido apartó “ilegítimamente” al país sudamericano del proceso de desminado. Daniel Filmus, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, explicó a la agencia Télam que ambos países aprobaron en 2007 un estudio de factibilidad para la remoción de las minas personales.
De acuerdo con Filmus, el país europeo decidió en 2009 incumplir el compromiso y realizar las labores por su cuenta; tal hecho, afirmó, “viola claramente la Resolución 3149 de Naciones Unidas, que dice que cualquier hecho que se haga en un área en disputa debe realizarse en acuerdo con la contraparte”.
Con información de AFP