La localidad de Viedma en Río Negro, Argentina, ha registrando una ola de robos desde principios de septiembre. En uno de estos, se identificó a un hombre que, en cada atraco, iba acompañado por un menor de edad, quien sería su hijo.
De acuerdo a la información brindada por las autoridades, tras un reciente asalto, el sospechoso pudo ser detenido con algunos de los elementos sustraídos. Además, las víctimas lo identificaron en ruedas de reconocimiento.
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Asimismo, la investigación también maneja la hipótesis de que el hombre habría usado a un niño para ingresar a las viviendas por lugares estrechos, y luego, poder abrir las entradas principales de los establecimientos.
El avance del informe indicaba que estaban dadas las condiciones para que el fiscal Guillermo Ortiz dispusiera la prisión preventiva. Sin embargo, un representante del Ministerio Público solicitó su liberación al argumentar que el acusado podría tener coronavirus tras haber manipulado pertenencias de uno de los vecinos asaltados que está infectado.
“Puede llegar a tener COVID-19, porque agarró las herramientas y existe la posibilidad de que las herramientas las haya agarrado el vecino con coronavirus”, fue el argumento por el que el fiscal decidió poner en libertad al hombre.
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La excarcelación generó indignación entre los vecinos de la zona de la Escuela Gaia de Viedma: “El delincuente ahora está comiendo asado con sus amigos y nosotros estamos metidos adentro de nuestras casas, totalmente asustados, porque no paran de robar en la zona”, señaló uno ellos.
“La excusa del fiscal Ortiz es que puede llegar a tener COVID-19 porque agarró las herramientas, y puede ser que las herramientas las haya agarrado el vecino con la enfermedad, así que imagínate el pensamiento rebuscado”, remarcó el vecino al portal Noticias Net.