Una niña de 10 años falleció después de sufrir violencia escolar por parte de su profesor de matemáticas en China. Según un informe policial recogido por China Daily, la víctima —que asistía a una escuela del condado de Cangxi, ubicado en la ciudad de Guangyuan— recibió la agresión tras equivocarse en una respuesta.
El docente le golpeó las manos y la hizo arrodillarse durante unos minutos, junto a otros ocho alumnos. La menor “se sintió mareada después del castigo” y fue hospitalizada. Murió alrededor de las 3.30 p. m. del último martes 15 de setiembre. Su abuela, Yang Juqing, contó que la llamaron del colegio para que fuera a buscarla.
Cuando llegó, su nieta ya no podía hablar ni abrir los ojos. La señora explicó que la pequeña le había contado varias veces que tenía miedo de su profesor de matemáticas, porque pegaba a los alumnos.
El agresor no ha sido identificado hasta el momento, pero trascendió que fue apartado de su puesto. El director de la institución, en tanto, fue suspendido. Un grupo de trabajo de la oficina de educación de Cangxi fue enviado de manera urgente a la escuela. Allí harán trabajos en coordinación con psicólogos.
China ha logrado controlar en gran medida la pandemia de coronavirus, y los colegios de todo el país —que fueron cerrados a fines de enero— han vuelto a abrir de forma gradual.
Los colegios tienen protocolos para evitar cualquier riesgo de rebrote y los alumnos deben portar mascarillas y evitar, en la medida de lo posible, los autobuses y trenes públicos.
En Wuhan, epicentro del virus, cerca de 1,4 millones de estudiantes reanudaron sus clases a inicios de mes en cerca de 2.800 jardines de infancia, centros de primaria y colegios de toda la ciudad. Los institutos de secundaria habían reabierto en mayo.