Un festival en la localidad taiwanesa de Hsinchu, en China, se convirtió en escenario de un insólito accidente. Una niña de tres años salió volando por los aires tras engancharse en una gran cometa, ante la mirada de sus desesperados padres y decenas de personas.
Según los medios locales, la pequeña participaba en el ’Festival Internacional de Cometas de Hsinchu’ con sus padres y se encontraba junto a una enorme cometa de color naranja la cual, una vez en el aire, arrojaría caramelos.
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Cuando los organizadores soltaron el objeto, una contundente ráfaga de viento la hizo volar y sus cuerdas terminaron por enredarse en la cintura de la niña, quien se elevó varios metros en el aire ante el estupor general.
La pequeña permaneció elevada durante unos 20 segundos, hasta que un soldado retirado aprovechó que la cometa perdió fuerza y saltó para atrapar a la niña cuando esta flotaba cerca del suelo.
El exsoldado mencionó que la niña tenía los ojos cerrados cuando él la agarró y que unos instantes después empezó a llorar, lo que fue un signo de que la pequeña se encontraba bien, según reveló a EFE.
Tras el incidente, las autoridades de Hsinchu decidieron suspender el festival, mientras que las imágenes grabadas por los espectadores fueron viralizadas rápidamente en las redes sociales.