Una mujer que trabajaba como enfermera en un hospital de la Universidad de Staten Island, en Estados Unidos, gastó cerca de 60,23 dólares en comestibles y gasolina tras robar la tarjeta de crédito de un paciente que estaba a punto de morir infectado por la COVID-19.
La ladrona, identificada como Daniela Conti, estaba a cargo del paciente Anthony Catapano, un hombre de 70 años que había ingresado a la Unidad de Cuidados Intensivos del mencionado nosocomio producto de su delicado estado de salud.
El anciano se encontraba conectado a un respirador artificial e inconsciente, momento que fue aprovechado por la sanitaria para sustraerle su billetera y otros artículos para la compra de diferentes productos. Sin embargo, la mujer fue descubierta por la hija del fallecido septuagenario a los tres días del hurto, debido a que notó en el estado de cuenta de su padre que se habían comprado productos por un monto de 60 dólares el día 9 de abril, fecha en que su familiar estaba internado en el centro de salud.
La hija de Catapano de denunció el robo y descubrieron que la enfermeras era la ladrona.
La joven denunció el robo y descubrieron que la ladrona había sido una de las enfermeras que atendía a su papá en el hospital de la universidad. Cámaras de seguridad del autoservicio donde se hicieron las compras dio a conocer a la autora del delito.
Daniela Conti estaba a cargo del paciente de 70 años que había ingresado a la UCI por COVID-19.
“No puedo creer que una persona pueda hacer algo así a alguien que lucha por su vida. Es asqueroso, nunca en un millón de años esperé que algo de esto sucediera”, expresó indignada Tara Catapano en diálogo con medios estadounidenses.
En una declaración proporcionada a CNN, Christian Preston, director de asuntos públicos del Hospital de la Universidad de Staten Island, dijo que Conti, que ha trabajado en el hospital desde 2007, ha sido “suspendido temporalmente y respondiendo a cargos por delitos graves”.
Tara que finalmente perdió a su padre por la COVID-19 espera que se haga justicia.
Tara, que finalmente perdió a su padre por el coronavirus, ahora está a la espera de que se haga justicia.